La presidenta de Consecomercio, Cipriana Ramos, indicó que la mercancía que se encuentra en los anaqueles es “incomprable” por la mayoría de los venezolanos, que su juicio en un gran número se encuentra segmentado en la “clase media hacia abajo”.
Aseguró que los productos que están llegando con precios internacionales no pueden ser adquiridos “con un bolívar súper devaluado y con unos salarios devaluados”.
“Aquí se violenta el Estado de Derecho, porque se viola la ley de precios justos”, dijo Ramos, quien se preguntó “para quién es esa ley”. Afirmó que la situación que afrontan muchos venezolanos “depende de la bolsa Clap, que puede llegar cada 15 o 20 días”.
“Eso no debe ser, uno debería tener libertad de ir a cualquier establecimiento y para eso es necesario tener libertad de mercado, para ello necesitamos la derogación de todos los controles”. La vocera principal de Consecomercio sustentó su argumento en la brecha que existe entre los precios regulados y los productos importados por el Gobierno: “Tienes un arroz importado a 2800 bolívares y tienes uno regulado que pasó de 200 a 800 bolívares”.
En entrevista en el programa Primera Página de Globovisión, agregó que no se sabe quién está importando esos productos.
Para Ramos la medida afecta directamente a los comercios, porque a su juicio no tienen el músculo financiero, para afrontar la inversión que requiere la distribución de mercancía a precios internacionales.
“Los comercios lo que están recibiendo es productos internacionales, hasta cuándo vamos a poder comprar esos productos”. Además, aseguró que los productos regulados son los que siguen teniendo mayor demanda, debido a que son los más asequibles.
Los Clap no son la solución
La medida que obliga a los industriales a destinar 50% de sus mercancías para los Clap no lo ve como algo novedoso. Al tiempo se pregunta “qué se va a enviar si no hay producción”. Afirmó que desde hace tiempo el Gobierno maneja la distribución de los productos de la empresa privada. Lo que calificó como un desvío de la mercancía.
Reiteró que el tema no es distribución sino de producción. Criticó que se descuidaron los sectores primarios y secundarios. “Descuidamos el sector agropecuario y la industria, pero -antes- teníamos recursos para importar”. Añadió que lo poco que llega es importando por el Gobierno.
Ramos destacó que las autoridades no están permitiendo las exportaciones. “La Guardia Nacional y el Seniat están prohibiendo las exportaciones a pesar de que cuentan con los documentos y permisos”.