Cientos de devotos unieron sus rezos en un mega rosario que se efectuó la tarde de ayer en el Paseo Juan Guillermo Iribarren.
El principal objetivo del acto religioso fue celebrar los 800 años de la fundación de la Orden de los Predicadores, la cual tiene como función evangelizar por el mundo entero su conocimiento y ofrecer estudios para fomentar la vida apostólica. También es conocida como la Orden de los Franciscanos.
El párroco de la iglesia Espíritu Santo, Jesús María Hernández, detalló que se unían en oración por la tradición de los dominicos y para presentar ante Dios las necesidades del país en los momentos difíciles de la historia. Así mismo hizo hincapié en que era un encuentro sin tilde político.
“La idea es unir nuestras oraciones a Dios, sin importar nuestras tendencias política o a qué religión pertenezcamos. Porque todos le pedimos al mismo Padre”, expresó Hernández.
La plaza se convirtió en un punto de encuentro para los feligreses de todas las parroquias del estado Lara, sacerdotes y agrupaciones religiosas. La actividad principal fue el rosario pero los participantes también fueron evangelizados a través de música y obras de teatro.
El arzobispo Antonio José López Castillo, en medio de la actividad, reflexionó y dio gracias a Dios por la congregación y la fe inmensa de los franciscanos, quienes entregan su vida a la iglesia para promover el desarrollo social y espiritual de las comunidades.
Recordó que la orden cumple 50 años en Barquisimeto, y que la razón por la cual conmemoran a través del rosario es porque la oración está unida a la creación de la Orden Dominicana y es un enlace para acercarse a la Virgen María.
Piden por el país
La mayoría de las súplicas de los participantes tenían relación con la situación de zozobra que se vive en el país.
Moisés Figueroa, miembro del Encuentro Familiar de Venezuela, expresó que todos los días le pide a Dios por la paz en Venezuela y reiteró la gran importancia de que todos los ciudadanos trabajen unidos y en oración para elevar sus plegarias ante Dios.
Dentro del público se escuchaban agradecimientos a los organizadores de la actividad por haber permitido que en un lugar público se evangelizara y difundiera la palabra de Dios. “Debemos expandir el evangelio en todos los lugares para conseguir la paz que necesita Venezuela”, expresó Ana García.