El agua, ese preciado recurso vital para el desarrollo de todas las actividades que hacen funcionar el organismo, el ecosistema, la industria, y en general la vida en el planeta tierra. Muchas personas desconocen los daños y desgastes que generan con acciones tan simples como dejar el gripo abierto durante el cepillado de los dientes. Para promover su valor y conservación, te enseñamos algunos consejos que debes practicar para ser parte del cambio que la naturaleza necesita. ¡Únete!
Mientras no la uses, ciérrala
La hora del baño es el momento del día en que más se despilfarra el agua. Lo único que debes hacer es cerrar la ducha mientras te enjabonas, aplicas el acondicionador o cualquier producto. En la medida de las posibilidades, darse baños más cortos, utilizando el agua sólo para retirar la espuma y enjuagarse, considerando que el tiempo promedio para la ducha diaria es de diez minutos, siendo lo recomendable una vez al día en la mañana, a menos que estén involucrados factores como el sudor por alguna actividad o se quiera relajar el cuerpo antes de dormir.
Reciclando el agua
Aunque parezca un tanto extraño, el agua con que se lava la ropa puede servir para muchas cosas después de cumplir con esta misión, por lo que antes de botarla, es mejor pensar si hay algún espacio de la casa que se pueda limpiar con agua reciclada, como por ejemplo el baño, el garaje o el jardín. Del mismo modo, una forma de ahorrarla es recoger el agua fría que sale de la regadera mientras llega el agua caliente, apartándola en envases para darles un uso posterior. El agua que se usa para cocinar los vegetales es ideal para regar las plantas; así que ya sabes, no deseches el agua de la olla.
Riego celestial
En épocas de lluvia, es completamente innecesario regar el jardín, pues la madre naturaleza, sabia y generosa, se encargará por sí misma de mantener las plantas verdes, rozagantes y llenas de vida. Cuando este no sea el caso, procura regarlas temprano o al anochecer para evitar su evaporación.
A cuenta gotas
Aunque muchos puedan pensar que unas cuantas goticas de agua desperdiciadas no enriquecen ni empobrecen a nadie, la realidad es totalmente diferente. Por pequeña o insignificante que parezca ser la fuga, cada gota que se escape innecesariamente representa una pérdida invaluable que bien podría salvarle la vida a una planta, a un perrito o a una persona sedienta, por lo que es vital reparar a tiempo todo tipo de goteos. Por ello, examina los grifos del hogar y tanques de los inodoros para contrarrestar cualquier fuga de agua.
Lava – Platos
Es mayor de lo que se cree la cantidad de agua desperdiciada durante la limpieza de la vajilla después de cada comida. La recomendación principal es enjuagar los platos, cerrar la llave, colocar el jabón a todos los utensilios de cocina y finalmente retirar el agua.
Mientras más luz, más agua
Apagar las luces cuando no las necesites y desenchufar los cargadores y demás artefactos eléctricos mientras no se estén usando, también es una excelente manera de ahorrar agua, ya que el recurso hídrico se consume en todas las formas de generación de energía. Por ejemplo, para mantener una bombilla de luz de 60 vatios encendida durante 12 horas, se necesitan más de cuatro galones de agua.
Limpiadores que ensucian
Leer detenidamente las etiquetas e indicaciones de uso de los productos de limpieza para así seleccionar aquellos que sean biodegradables es otra alternativa eficaz, debido a que el agua empleada para limpiar y diluir los químicos, entra por las cañerías y llega a los arroyos, ríos y bahías, contaminando importantes fuentes que se traducen en la extinción de fauna marina.
Difunde el mensaje
No importa la insistencia o la molestia que pueda generar en algunas personas escuchar de forma repetida este mensaje, la constancia tiene sus logros. Así que cada vez que veas a una persona despilfarrar no temas en manifestarlo con respeto, explicando el daño que ocasiona y como puede ser evitado. Por último, pero no menos importante, recuerde que la información es poder y mientras más conocimiento se tenga del tema, mayor impacto positivo se podrá generar. Siempre existirá una organización no lucrativa o fundación dispuesta a abrir sus puertas para aportar conocimientos e incluir voluntarios, que se sumen a la causa de cuidar el planeta.