#RevistaGala José Rafael García Vocación por el ambiente

-

- Publicidad -

Ingeniero agrónomo, conservacionista y luchador incansable de la naturaleza venezolana, el maestro que presentaremos en las siguientes líneas ha entregado su vida al trabajo ambientalista. Dada su impecable e ilustre labor y una serie de aportes en cuanto a parques nacionales y otras zonas protegidas, este fiel amante del Ávila nos acompaña en esta nueva edición…

Nacido en Caracas el 4 de marzo de 1926, José Rafael García Acosta es un verdadero representante de lo que significa el trabajo por la vida, con el firme deseo de encaminar a la sociedad hacia un pensamiento justo, equilibrado y amigable con el ambiente.

- Publicidad -

Su labor profesional inicia en 1951 cuando ingresa al Ministerio de Agricultura y Cría (MAC) ocupando distintos cargos administrativos en el área de parques nacionales. Allí, aprendió muchísimo de grandes profesionales y sentó las bases de un largo camino, que sin pensarlo, le traería muchos retos.

Sin duda alguna, el haberse rodeado de grandes personajes en el área conservacionista como Francisco Tamayo y Gerardo Budowski fue trascendental para crecer, desempeñándose finalmente como experto en contacto directo con el entorno. “La naturaleza es muy compleja y cuando haces excursiones te enteras de muchas cosas que no las ves en los libros, y debo decir, que eso siempre me ha encantado”, comenta el Ingeniero.

Como docente, fue uno de los fundadores de la Cátedra “Conservación de Recursos Naturales” de la Facultad de Agronomía del la UCV y contribuyó en la formación de peritos forestales del Junquito en Caracas además de ejercer labores en el Centro de Instrucción de las Fuerzas Armadas de Cooperación y asesorar un significativo número de trabajos de grado, sin embargo, nunca le gustó quedarse fijo en un área u oficio, por lo que permanentemente indagaba, para sumar a la lucha conservacionista y aportar desde cualquiera escenario.

Gracias a ese ímpetu y unas ganas desbordadas, recibe la oportunidad de estudiar fuera del país, ampliando sus conocimientos y especializándose en Silvicultura, Evaluación de Recursos Naturales Renovables, Reforestación y Áreas Naturales y Turismo en países como Perú, Brasil, Puerto Rico, República Dominicana y España, de la mano de celebres conservacionistas a nivel mundial. Todo ello fundamentó su experticia en manejo de espacios, cuencas hidrográficas, restauración de bosques y defensa y mantenimiento del patrimonio natural, cultural y social del país, convirtiéndolo en un hombre admirable, que actualmente, con 90 años y una cálida sonrisa, refleja el pasar de los años pero también lo gratificante de muchas experiencias vividas.

Un proyecto materializado

Jose_Rafael_Garcia_sinopsis-25 - copia

Una de las grandes contribuciones de este soñador, fue el aporte ofrecido para delimitar ciertos espacios naturales y así procurar el rescate, la supervivencia y el mantenimiento de los mismos. De allí que estuvo a cargo de la gerencia de Parques Nacionales y Monumentos Naturales de Venezuela, organizando la administración de estos lugares y diseñando políticas que integraron,  diversos actores sociales trabajando con mística por un fin común. “Lo primero que hicimos fue decretar zonas protegidas, para darle sustento legal y así conservar todo lo que guardaban. Indudablemente un trabajo difícil, pero se logró materializar gracias a mucha gente dedicada”, agregando que la mayoría formaba parte de una generación que mantenía sus ideales con el corazón.

En esas andanzas, durante su gestión José Rafael logró traer a Latinoamérica y especialmente a Venezuela el IV Congreso Mundial de Parques Nacionales que reunió en la ciudad de Caracas a delegaciones de los distintos continentes y trabajó en 2 importantes casos de zonas protegidas en el país: el rescate del Parque Nacional Morrocoy y la Preservación del Parque Nacional Waraira Repano conocido cariñosamente como El Ávila,  enfrentándose en este último con grandes incendios forestales que pusieron en riesgo su vida, pero que no le impidieron cumplir con sus labores como guardián de las montañas, defendiendo sus preceptos de ambientalista ganado al hecho por encima de la palabra.

Esta filosofía de vida lo llevo a pernoctar para salvaguardar zonas, aprendiendo cómo actuar ante situaciones de contingencia, hecho que califica “de gran aprendizaje” pues, sirvió para demostrarse así mismo, lo que era capaz de hacer sin importar los riesgos que pudieran originarse. De igual forma, García es considerado por muchos como el responsable del verdor del Ávila, pues fue el encargado de reforestar una gran parte de sus hectáreas, controlando además el crecimiento de la capital del país, gracias al establecimiento de linderos que dieran prioridad a este importante reservorio de biodiversidad.

Actualmente, luego de un largo camino andado que incluye, diversas publicaciones científicas y una participación destacada en un sinfín de congresos y encuentros internacionales, este gran hombre considera que el único camino para reivindicarse en materia de protección y resguardo ambiental, es a través de la educación que nace en la academia. Siendo esta un lugar donde se formarán profesionales listos para indagar, investigar y rediseñar políticas capaces de generar cambios y así mantener la vida en estos espacios de atractivo turístico, que en su gran mayoría, sirven para el esparcimiento de todos los venezolanos.

Honor a quien honor merece…

Jose_Rafael_Garcia_sinopsis-9

Entre los reconocimientos que ha obtenido destacan: Orden Libertador en el Grado Oficial (1964), Botón Cuatricentenario de Caracas (1964), Premio William Henry Phelps (1977), Orden Orange Nassau en Grado Oficial (1977), Orden Henri Pittier en su 1ra Clase (1981) y Premio al Mérito Fred. M. Packard, concedido por el III Congreso Mundial de Parques Nacionales en Bali 1982, donde resultó premiado como el funcionario más destacado en Áreas Naturales Protegidas del Hemisferio Occidental para aquel entonces.

Además, destaca la reciente Orden 22 de Septiembre en su Única Clase, otorgada por la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado, así como  la aprobación en Consejo Universitario del Epónimo de la Cátedra Libre «Gestión Ambiental Sostenible, José Rafael García Acosta».

 “La educación es clave en el rescate de las bellezas naturales venezolanas”

 “Si no tienes un país con gente preparada, no puedes caminar hacia el desarrollo”

 

Pulsa aquí para apoyar la libertad de expresión en Venezuela. Tu donación servirá para fortalecer nuestra plataforma digital desde la redacción del Decano de la Prensa Nacional, y así permitir que sigamos adelante comprometidos con la información veraz, como ha sido nuestra bandera desde 1904.

¡Contamos contigo!

Apóyanos aquí

- Publicidad -

Más leido hoy

- Publicidad -

Debes leer

- Publicidad -
- Publicidad -