En motos y busetas llegaron a la planta Chivacoa de Alimentos Polar centenares de personas provenientes de los 14 municipios del estado Yaracuy, para exigir la entrega de un cargamento de harina de maíz precocida que, según la alcaldesa del municipio Trinidad, Yosmary Guevara, el Gobierno regional canceló hace dos meses para dotar a los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap).
Sobre este fundamento los manifestantes se instalaron en la entrada de la empresa, respaldados por Guevara y otras tres autoridades municipales de Yaracuy, impidiendo con esta acción, la salida a los trabajadores, quienes por medidas de seguridad debieron permanecer dentro de las instalaciones mientras transcurría la protesta.
Guevara explicó que inicialmente se pagaron siete gandolas y, luego, otras dos, para completar las nueve acordadas. De estas Alimentos Polar despachó cinco, por lo tanto, les adeudan cuatro. Las intenciones de Empresas Polar con este retraso, al modo de ver de la alcaldesa, es desestabilizar a la sociedad: “Quieren generar malestar, confusión dentro de la comunidad y desde mi punto de vista el primer bachaquero corporativo es Lorenzo Mendoza y su Empresa Polar porque se han dado a la tarea de boicotear y sabotear la gestión de los Clap”.
Avanzada la tarde, se presentó el secretario de seguridad ciudadana de Yaracuy, David Lozsán, quien ordenó el traslado de dos gandolas, retenidas por los manifestantes en la parte frontal de la compañía, hacia el Servicio de Abastecimiento Yaracuy, localizado en San Felipe. A mano alzada escribió con ayuda de la alcaldesa Guevara dos actas donde se notificaba a la empresa de transporte encargada de movilizar la mercancía las razones del desvío.
“No ha habido ningún tipo de respuestas por parte de la directiva de Empresas Polar con el conglomerado que está aquí. Por eso, estamos tomando una acción amparados en el decreto de emergencia económica de Nicolás Maduro”, argumentó Lozsán sobre la “medida forzosa” ejecutada.
También, aseguró que el procedimiento no era ilícito: “La medida de excepción como autoridad pública me habilita como funcionario a pedirle el apoyo (a la policía regional) del traslado de dicha mercancía hacia el centro de distribución del estado Yaracuy”.
El gerente de la planta, Aníbal Solipa, por su lado, informó que las gandolas contenían 57.600 kilos de Harina P. A. N. destinados a Makro y Pdval y “fueron desviadas a la fuerza por las autoridades locales”.
“Estas actuaciones afectan el abastecimiento de harina precocida de maíz en un momento en el que todos debemos estar dedicados a garantizar la producción y el abastecimiento de alimentos sin interrupciones”, subrayó el ejecutivo.
Por la manifestación que se prolongó durante todo el día, la empresa no pudo despachar 1.092.000 kilos de Harina P. A. N. hacia centros de distribución y se impidió la recepción de 900 toneladas de maíz blanco, 341.000 kilos de alimentos balanceados para animales y 165.000 kilos de alimentos para mascotas.