De los 28 créditos solicitados al Concejo Municipal de Iribarren por el alcalde, Alfredo Ramos, solo 24 fueron aprobados en la sesión de este martes, mientras que otros cuatro fueron rechazados por los ediles.
Estos servirán para el ajuste salarial de los trabajadores de las dependencias de la alcaldía, que a partir de ahora devengarán salario a Bs. 22.576,50 y un bono de alimentación de Bs. 18.585.
Los cuatro créditos no autorizados corresponden a Emica, Contraloría Municipal, Fundación del Niño y al Consejo Estadal de Protección al Niño, Niña y Adolescente (Cedna).
Alejandro Natera, presidente de la Comisión de Asuntos Económicos y Financieros, expuso que tales solicitudes de crédito presentan irregularidades, debido a que “se aumentaron para cobrar el bono de alimentación a Bs. 42.480”.
Los concejales bolivarianos no dieron su voto para la aprobación por considerar que se trata de una injusticia. ¿Será que los trabajadores tienen clasificación de primera, segunda y tercera?, preguntó Natera en la sesión, en la que tuvo participación la masa laboral de la municipalidad.
El edil recalcó que “indistintamente si usted cree en Alfredo Ramos, en Joel Mendoza o en Chuchín, debe luchar por hacer valer sus derechos”.
Mientras que el grupo de concejales de la Mesa de la Unidad, consideró que la decisión que se tomó evidenció la envidia y mezquindad de parte de los concejales bolivarianos.
Omar Jiménez indicó que lo correcto era votar para beneficiar a los trabajadores de esas cuatro instituciones y progresivamente luchar por igualar el beneficio para todos.