El papa Francisco ofreció este domingo su «oración al pueblo mexicano» para que «cese la violencia que en estos días ha golpeado también a algunos sacerdotes», antes de celebrar una misa en la plaza San Pedro del Vaticano.
«Me asocio de buena gana a los Obispos de México para sostener el compromiso de la Iglesia y de la sociedad civil en favor de la familia y de la vida, que en este tiempo requieren especial atención pastoral y cultural en todo el mundo», afirmó el papa argentino.
Además, el pontífice ofreció su «oración por el querido pueblo mexicano, para que cese la violencia que en estos días ha golpeado también a algunos sacerdotes».
Esta semana, un sacerdote que predicaba en el violento estado mexicano de Michoacán (oeste) fue secuestrado, según denunció el jueves un cardenal. Tres días antes, se produjo el hallazgo de los cadáveres baleados de otros dos curas en Veracruz (este).
Según el Centro Católico Multimedial, desde que el presidente Enrique Peña Nieto asumió el mandato, en diciembre de 2012, 14 sacerdotes, un seminarista y un sacristán fueron asesinados, y dos sacerdotes desaparecieron en México.