Para muchos conductores, sobre todo para aquellos que han tenido la mala suerte de caer en los enormes huecos que constituyen las “bocas de visita” sin tapa en diferentes vías de la ciudad, la indiferencia de las autoridades para reponerlas resulta preocupante.
Aunque no se trata de un problema nuevo, últimamente se ha agravado, como se puede constatar a diario al desplazarse por avenidas como la Florencio Jiménez, la Libertador, Rómulo Gallegos, y hasta algunas de las remozadas recientemente.
En la Florencio Jiménez, concretamente en el canal de servicio en sentido oeste-este, entre los sectores Camas- Lara y el Cementerio del Oeste , son numerosas las “bocas de visita” sin tapas.
Algunas se encuentran fracturadas por los años recibiendo el peso de todo tipo de vehículos, incluyendo de cargas pesadas, pero la mayoría desaparecieron producto de acciones de los delincuentes que las han sustraído para venderlas a talleres de fundición.
“Esto es un serio peligro para nosotros que tenemos que pasar a diario por aquí, a pesar de que ya sabemos cuales no tienen tapas, pero aún así a veces nos sorprenden y caemos, pero peor les pasa a los que no circulan con frecuencia”, manifestó el chofer de una buseta de una ruta del oeste.
En ese tramo se calcula en diez el número de bocas del alcantarillado destapadas.
Pero esa irregular situación no sólo se presenta en el canal sur de servicio de la Florencio Jiménez, entre Camas Lara y el Cementerio Municipal o del oeste, porque también faltan en la avenida Libertador, uno de esos sitios en el cruce hacia la 42, donde ya han caído unos cuantos vehículos con los consecuentes daños materiales.
El hueco está en pleno cruce y sorprende a los conductores.