“Venezuela es un país que necesita a un pueblo unido para salir adelante. No hay cosa que el Gobierno tema más que un pueblo unido, eso es más peligroso que una metralleta”. Así lo refirió la figura musical más importante de Venezuela, La Primerísima Mirla Castellanos, quien visitó la ciudad de Barquisimeto en su semana aniversaria para regalarle un esplendoroso concierto dedicado a cada uno de sus habitantes.
Durante su visita a la ciudad crepuscular, Mirla Castellanos compartió escenario con los artistas Jonathan Acosta, quien interpretó su éxito Ánimo Venezuela y Diana Yépez que estrenó el tema Lo nuestro es lo mejor.
Fue un espectáculo que conectó al público con la energía positiva que los cantantes buscaron transmitir hacia todos los rincones de la ciudad y del país, con un canto de esperanza y optimismo.
“No es fácil abrir camino en este mundo, pero una persona que puede decir con orgullo ´tengo 50 años en este trayecto´ es Mirla Castellanos. Los tres nos unimos creyendo en una sola Venezuela, haciendo cosas positivas y este concierto es un ejemplo de que sí se pueden hacer grandes cosas con determinación, voluntad y empeño. Somos más los buenos que los malos, aunque haga más ruido una bomba que un beso, pero si somos más los positivos tenemos que unirnos en este camino hermoso que es la vida, para defender nuestra raíces”, expresó el artista Jonathan Acosta.
La actividad, bautizada Motivos para Celebrar, sirvió para conmemorar los 464 años de la ciudad crepuscular, el noveno aniversario del restaurante Pescar Grill, el octavo aniversario de Gente Lo Nuestro y, sobre todas las cosas, los 50 años de la vida artística de Mirla Castellanos.
-¿Cuando comenzó en el mundo artístico, alguna vez se imaginó que iba a llegar tan alto?
-No me imaginé en el “zaperoco” en el que me estaba metiendo. Pero sí soñé que yo quería cantar, no sé si iba a ser famosa o no, pero quería ser artista. Después fue que me fui preparando cuando vi que la cosa ya se tornaba muy seria.
-¿Qué ha sido para usted llegar a los 50 años como cantante?
-Se dice fácil… si a mí en ese momento en los 60 me hubiesen dicho “tiene que pasar por 50 años de carrera artista”, yo me bajo de ese autobús, pero llegué rápido. Han pasado tantas cosas muy buenas gracias a Dios, porque yo me lo he ganado, nadie logra las cosas por suerte, la suerte se la labra uno mismo y yo quiero mucho y respeto mucho mi profesión.
-¿Cuál es el mayor reto que ha enfrentado en estos 50 años?
-Le tengo pánico al público, es un respeto que le tengo porque a veces me ven, aplauden, piden abrazos y fotografías pero siento que me dicen: está gorda, ese trapo no le queda bien, la canción está rara. Pero eso es parte de la organización público- artista.
-¿Cuál es la mayor lección que por los momentos le ha dejado su carrera?
-El respeto y la honestidad que tengo yo con mi trabajo artístico. La ética profesional no queda de lado.
-¿Cómo se siente al saber que está cumpliendo 50 años de vida artística?
-Me siento joven porque yo tengo 75 años, 50 es muy joven. Me siento satisfecha y yo sé que puedo dar muchas cosas más y digo que he tenido muy buena vida tanto privada como artística.
-¿Cuál ha sido su mejor época?
-Yo pienso que hay buenas épocas y siempre va a haber una mejor que la otra. Ahorita estoy viviendo un momento delicioso con mi grupo de las grandes de Venezuela, porque cada una lleva su carrera independiente y cuando nos contratan a las cuatro hacemos un majestuoso espectáculo. Eso fue un gran reto, tanto para ellas como para mí.
Una cosa importante, yo soy una cantante no una vedette, porque la vedette es aquélla que está bien buena y luce las piernas, el cuerpo, el trasero, la parte delantera, la cara o el pelo. A mí me dicen que soy una vedette porque uso plumas, pero todos usamos plumas. A pesar de eso, lo que he me puesto yo es mi talento creador que Dios me dio y con el cual sigo trabajando.
-¿Qué hay que hacer para alcanzar los sueños?
-Respeto, creer en uno mismo, yo creo mucho en mí. A lo mejor hago un show y a la gente no le gusta, no me importa, ellos se los pierden, porque yo creo en mí, en lo que estoy haciendo.
-¿Cuántas horas ejercita su voz para mantenerla en forma?
-La voz, la cara, el cuerpo y la vida envejecen porque estás cumpliendo años y cuando pisas los 75 te va a cambiar la voz. Yo podré seguir en esto a mis 85 años de edad, pero tiene que cambiar, es una ley de vida y yo no puedo estar ausente de eso, la cuido y la manejo muy bien.
-¿Escenario preferido?
-Me siento como pez en el agua en cualquier escenario, pequeño, grande o mediano.
-¿Canción preferida?
-Tengo muchas y no puedo mentir en eso, me encanta: La Tómbola, Maldito amor, Si no estuvieras tú, Muere el amor, Venezuela. Tengo muchas canciones, yo tengo una suerte que mi show es puros éxitos musicales, el público ha crecido con mis canciones.
-¿Qué siente cuando se para frente a un escenario?
-Siento que debo hacerlo bien, y cuando veo la reacción del público con sus aplausos o se quedan tranquilitos viéndome, estoy logrando lo que quiero en ese momento.
-¿Cómo hace usted para combatir el estrés?
-Yo soy muy nerviosa y me gusta que las cosas estén listas inmediatamente, error, las cosas no pueden estar listas en el momento. Soy muy delicada y exigente en el trabajo, cuando siento un nivel de estrés me enrollo el pelo, por eso me lo corte porque lo tenía todo partido.
-¿Con qué proyecto actual está trabajando?
-Quiero hacer un buen disco, que no sea para pegarlo en la radio, es un gusto que yo me doy y se lo brindaré a toda la gente. Y un programa de televisión que lo estamos finalizando pero ya para el año que viene. Este año se me va con actuaciones, con las grandes en el interior del país, y son fechas que tengo que cumplir.
-¿Qué impresión le dejó Juan Gabriel?
-Esa gente no debería morir, lo que me dejó fueron sus canciones y amistad, todo muy hermoso. Venezuela fue el primer país que pisó en la gira por Latinoamérica y fue en el programa de televisión Él y Ella, que protagonizaba con Miguel Ángel Landa.
-¿Qué le regalaría a Barquisimeto en su aniversario?
-Mi corazón, honestidad, ese sabor tan hermoso que tiene Barquisimeto. La tierra que me ha regalado la música al ser la capital musical de Venezuela.
-Un mensaje a los jóvenes artistas…
-Que tengan paciencia, luchen y sean ellos mismos, no se preocupen si pegó el disco hoy o mañana, a lo mejor pasado mañana sí lo hacen. Sobre todas las cosas, que se preparen y observen y traten de conservar su voz. Hay una cosa muy importante que nos decía Renny (Ottolina): “No se le llega nunca a un empresario o compañero de trabajo tarde”. Eso me parece a mí una falta de respeto, lleguen temprano y con su letra aprendida.
-¿La crisis ha afectado en parte a la industria musical?
-Al contrario, ha ayudado a que se defiendan más y vengan más artistas. Unos quedan otros se van.
-¿Qué necesita el país para cambiar?
-No vamos a esperar que este Gobierno que se está gastando Venezuela, cambie, a ellos nos les interesa cambiar, porque no les duele el país ¡Arrieros somos y en el camino andamos! A este país lo que le hace falta es que todos luchemos por él. Yo lucho por ti, tú por ti, cada uno en su frontera pero a favor del país. Si yo lucho pero no te doy oportunidades a ti, eso está mal, todos tenemos que unirnos, los negros, los blancos, los ricos, los pobres, los buenos, los malos, los feos y los bonitos. Este país tiene con que para que sea un primer mundo, pero, lamentablemente, estamos en manos de gente muy resentida socialmente, con mucho dinero. Tú tienes el dinero pero nosotros la honestidad y sabiduría para sacar adelante a nuestro país.
¡A mí que me dejen una manguera para regar las matas de todo el país! Esa sería mi cuota de ayuda. Si no nos unimos esto no va a poder ser. No hay cosa que el Gobierno tema más que un pueblo unido, eso es más peligroso que una metralleta.
-¿Qué significa Dios en su vida?
-Yo soy fan de Dios y San Judas Tadeo. Tengo la Virgen María en todo su esplendor. Soy amante de todos esos santos, cargo mi carterita llena de postalitos y todos los domingos voy a misa. Detrás de mi casa queda la iglesia La Caridad del Cobre, y pido por mi familia, mi país, por los enfermos. Le pido como lo hace gran cantidad de personas, yo creo que todos estamos en esa nota. Para mí, Dios es lo más bello y hay que adorarlo, quererlo, amarlo, llevar y cumplir todos los mandamientos, porque es nuestra Carta Magna.
-¿La fe mueve montañas?
-Puede, no es fácil, se tiene fe pero a veces caemos en la depresión de que algo no se nos cumplió, pero no importa, se va a cumplir, porque Dios está con nosotros.
No pierdan la fe en que va a pasar algo bello. Esto es un pueblo muy bello, con gente muy amigable. No podemos perder eso de que cuando el avión aterriza aplaudimos dentro de él, eso se ha ido perdiendo, porque estamos pendientes de otros problemas como la inseguridad, el costo de la vida, la comida cara, pero de repente estamos aprendiendo una gran lección.
-¿Qué es lo más hermoso que tiene Venezuela?
-Su gente, la gente hace un país. Es una casa muy linda, pero la gente que vive dentro de esa casa es la que hace que esa casa sea casa y nosotros somos así, abiertos, con esperanzas, gratitud, no somos pretenciosos, somos dados a darle la mano al que viene de afuera y eso no se puede perder.