Cuando se pierde a un ser querido físicamente en esta vida se vienen a la memoria muchos recuerdos, por ejemplo: ¿cuántas veces le dijimos “gracias” por algún favor, acompañamiento, enseñanza, consejo, regalo, ayuda o beneficio dado por ese ser ?. En ocasiones se nos olvida esta palabra tan sencilla de expresar, que no necesariamente debe ser hablada pues hay gestos que pueden expresar la misma intención. Pero cuando se tiene de cerca el cuerpo ya fallecido de esa persona o de ese ser querido es donde se hace un nudo en la garganta, se la abraza, besa, llora y se le dice: ¡Gracias por todo!. Así mismo, se recuerda ¿cuantas veces le dije te quiero, lo besé o abrace?.
Nunca es tarde para aprender o reflejar nuestro amor y sentimientos a los seres que amamos, incluso a las mascotas que nos acompañan; porque me imagino por ejemplo al perro que protege o guía a un ciego, así como un delfín, caballo entre otros “amigos” fieles. Recientemente el departamento etología y el grupo de investigación de etología comparada de la Universidad de Budapest en Hungría comprobó que los perros entienden a sus dueños o entrenadores cuando estos les hablan y como es el tono en la comunicación , además están mas atentos si los recompensan con premios o caricias.
Fuente: web de intramed. Science Septiembre.2016
Hay que abrazar, besar y agradecer al prójimo durante nuestra vida y no dejarlo para el final de sus días o de los nuestros. Generalmente la gente no espera que le den las gracias o no le da importancia, porque hay otras maneras de expresar la gratitud de las personas y cada ser humano lo dice o lo refleja a su manera.
Hay oraciones que empiezan con la palabra “gracias” o agradeciendo a Dios por los favores recibidos o simplemente por darnos el pan de cada día a la hora de comer. Creo que nunca esta demás decir gracias y enseñarles a nuestros hijos el valor o significado de un gesto de agradecimiento.
Ejemplo de oración: “Gracias te damos, señor y Dios mío
que me has dejado amanecer con bien,
ver la luz del día presente, que sea señor
para tu santo servicio y provecho de mi alma, Amén”.
Recuerden, estar en gracia de Dios es diferente a decir gracias a Dios.
Gracias de nuevo papá, mamá y al prójimo por todo lo que me han enseñado….Los quiero mucho.