Hoy más que nunca los adultos mayores necesitan que el presidente Nicolás Maduro se decida a poner el ejecútese a la Ley de Seguridad Social, ya aprobada por la Asamblea Nacional, a la que el TSJ también le dió la constitucionalidad, pero no ha entrado en vigencia con el argumento de que el Estado carece de recursos para su financiamiento.
Para exigir públicamente la puesta en práctica de ese beneficio, un considerable número de personas de la tercera edad se congregó este martes en la plaza Altagracia, donde también se llevó a cabo una jornada de carnetización para disfrutar de la gratuidad en el transporte colectivo urbano.
Allí estuvo la diputada a la Asamblea Nacional, Bolivia Suárez, quien criticó al presidente Maduro “por seguir chantajeando a los viejitos con esa ley, simplemente dándoles mendrugos para que tengan que continuar dependiendo del gobierno para obtener alimentos o medicinas.
“Los adultos mayores no tienen para comer, mucho menos para comprar las medicinas que necesitan para seguir vivos; por eso nosotros en la asamblea seguiremos insistiendo en la aprobación de esa ley, que figura en el artículo 80 de la Constitución que obliga al Estado a darle calidad de vida a todos los venezolanos”, manifestó la parlamentaria.
Con respecto al pasaje gratuito en el transporte colectivo, Bolivia dijo haber hablado con Erick Zuleta para que los conductores de las unidades respeten esos carnet y permitan a los adultos mayores y discapacitados disfrutarlos.
Entre los presentes había mujeres y hombres de edad avanzada, algunos en sillas de ruedas o apoyándose en bastones, con la esperanza de conseguir mayores beneficios del gobierno.
Entre ellos estaba la pareja conformada por Lenín Querales y María Hernández de Querales, de 80 y 76 años, respectivamente.
“Yo tengo la pensión del seguro, pero eso no nos alcanza ni para comer, además de que, como soy enfermo del corazón, debo tomar unas medicinas que me salen muy caras, cuando las consigo”, dijo Lenín.
Cándida Malvacías, por su parte, dijo estar beneficiada por una misión, pero la misma le resulta insuficiente para sus gastos.
“Yo tengo que gastarlo todo, los 15 mil bolívares, en medicinas, y si compro los remedios no como, o sea que uno está en problemas todo el tiempo”, expresó.
Pidió al gobierno aumentar las pensiones de las misiones como se hizo con las del Seguro Social.
“Tenemos que presionar para que hagan eso porque lo que recibimos no alcanza para comprar comida y medicamentos, y si caigo con los bachaqueros peor, nos quitan toda la poca platica”, dijo por su parte Paula Pérez.