Cinco alcabalas colocadas en el trayecto comprendido entre Barquisimeto y Chivacoa, el retraso de los autobuses por aparentes presiones de las cúpulas del Gobierno hacia los transportistas, cambios logísticos de último momento, no lograron reducir la disposición de los larenses de viajar hasta la capital del país para sumar su cuota de compromiso ciudadano en la Gran Toma de Caracas, convocada por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) para hoy.
Desde ocho puntos de Barquisimeto salieron los autobuses ocupados por el peso del entusiasmo de dejar expreso en la calle, la necesidad de que se realice dentro de tres meses el referendo revocatorio, percepción en la que coincidieron los dirigentes de diferentes factores políticos en los lugares de partida.
De cinco mil almas se tenía contabilizado es el aporte que Lara dará a la acción de calle. Todos, subrayó la secretaria de organización de Acción Democrática (AD), Karelys Heredia, acuden equipados con la paz: “Es una movilización de los larenses que quieren cambios, que van a la Toma de Caracas con el compromiso de luchar de manera pacífica, constitucional por los derechos de todos los ciudadanos”.
Afirmó que de presentarse situaciones irregulares en el camino se bajarán de las unidades a protestar para hacer valer el derecho de los venezolanos de manifestar sin violencia. De generarse en Caracas hechos en contra del orden público, aseveró Heredia, y que lesionen a los manifestantes, “el único responsable es el Gobierno nacional que de manera tajante ha dicho que no permitirá que estemos en la calle”.
El militante de Voluntad Popular, Alexander Camacho, por su lado, señaló que es el mismo Gobierno quien intenta desestabilizar imponiendo trabas para que los habitantes del interior del país se trasladen hacia Caracas.
La transcendencia de la actividad, consideró la líder nacional de AD, Sobella Mejías, está asegurada porque quedará en evidencia el descontento ante la crisis humanitaria y de hambre por la que atraviesa la ciudadanía. “El pueblo, no importa su ideología, quiere paz”, dijo Mejías. De allí el exhorto a que se atienda la solicitud de la ciudadanía de que se dé el revocatorio este año.
Sin miedo, declaró la dirigente juvenil de AD, Soley Zambrano, abordaron los buses los jóvenes de los nueve municipios para exigir la cristalización de un proceso electoral “contra un Gobierno que nos tiene pasando hambre” y sin oportunidades para la generación de relevo, sostuvo.
Concentración en la Macario Yépez
Los líderes opositores, antes de viajar, invitaron a los larenses a sumarse a la concentración programada para resolverse en la plaza Macario Yépez para quienes por diversas razones no pudieron movilizarse hasta la capital.
Desde este punto o desde casa, dijo Heredia, “lo importante es hacer saber que los larenses estamos resteados con el cambio”.
Alexander Camacho
“Se trata de un proceso en el cual se convoca para demostrar numéricamente que hay un pueblo decididamente resteado a exigir el cambio que Venezuela procura, que es un cambio pacífico, ciudadano, constitucional y además electoral. Estamos solicitando que se acuñe a los reglamentos establecidos el proceso de convocatoria a la recolección del 20 por ciento de las firmas y a ese proceso el Gobierno le tiene miedo porque sabe que hay más del 20 por ciento dispuestos a firmar”.
Karelys Heredia
“Este primero de septiembre representa para el Gobierno de Nicolás Maduro y su combo, que los adecos, los larenses y venezolanos estamos preparados para mantenernos en pie de lucha por la defensa de los valores democráticos y entre esos está el derecho a la alimentación, a la salud, a la vivienda, a la igualdad de oportunidades y, sobre todo, el derecho a las libertades políticas”.
Sobella Mejías
“Es un llamado por esta Venezuela que queremos en paz, que tiene que resolver sus problemas políticos, económicos de manera pacífica, democrática, constitucional y electoral. Es un llamado también a todos los poderes del Estado que tienen que reconocer el pueblo mayoritario que quiere tener mejor calidad de vida. Un llamado al poder electoral que tiene que garantizar principios de igualad, de celeridad”.