Uno de los internos de la comunidad penitenciaria de Fénix se encontraba haciendo la limpieza en las habitaciones de los custodios y tras abrir uno de los locker, se sorprendió al ver unas armas, unas granadas y un dinero.
De inmediato le advirtió a la directora del penal sobre la novedad, pues los custodios no pueden tener armamento alguno sino es en su respectivo parque de armas. Los funcionarios de la Guardia Nacional fueron alertados y comenzaron la requisa.
Otra versión indica que los funcionarios de la GNB del Destacamento 121 ya tenían la información porque aparentemente las armas habían ingresado desde hace 15 días al penal.
Efectivamente los castrenses localizaron dos granadas de mano que no son de uso militar, así como dos armas de fuego tipo pistola, una Glock calibre 9 milímetros y una .45, cartuchos de .45, balas de nueve milímetros y 30 cartucho de escopeta 12.
Así mismo se consiguieron seis teléfonos celulares y 200.000 bolívares en efectivo.
En principio fueron detenidos cuatro custodios, entre ellos uno a quien todos conocen como “El Gato”; otro de apellido Laguna, quien estaba a cargo de la última alcabala por la que deben pasar todos los funcionarios que ingresan y tiene un detector de metales; otro, que tiene por nombre Alfredo, y una mujer. Estos dos últimos serían los que supuestamente pasaron todo lo incautado.
Según explican las fuentes cercanas a la investigación sería un “encargo” de un preso que es de nacionalidad francesa, al que todos conocen como “El Lobo”. Paga una condena por el delito de narcotráfico.
El sujeto tenía planes de tomar el control del penal, porque desea impedir a toda costa ser extraditado a Francia, país que lo está requiriendo.
Los castrenses presumen que ese dinero no sea el único que existe. Saben que el pago debió ser mayor.
Luego de las investigaciones practicadas entre la mañana y la tarde de ayer, detuvieron a un total de 11 custodios penitenciarios.
Cabe destacar que para que el armamento y las granadas llegaran a los dormitorios debieron pasar tres alcabalas.
Todos los detenidos fueron puestos a orden de la Fiscalía de Delitos Comunes y Corrupción del Ministerio Público, a quienes también se le investiga por el cobro de privilegios para los reos y para traslados de un penal a otro.
