En este tiempo de crisis, cuando el salario no alcanza para cubrir las necesidades básicas de cada trabajador y cuando ha transcurrido tan solo una semana del anuncio de aumento del salario mínimo básico nacional ¿se justifica un aumento en el costo del pasaje urbano?. Es la pregunta que se hacen los usuarios del transporte en la ciudad, en especial en el eje metropolitano Barquisimeto- Cabudare, donde reina la anarquía en el monto que piden conductores y colectores a los pasajeros.
Las denuncias y quejas están a la orden del día, varios usuarios contaron a este rotativo que desconocen cuánto le cobrarán cada vez que se suben a una buseta para “ir a Cabudare y subir a Barquisimeto”.
Carolina Uzcátegui narró lo que vivió la mañana lluviosa de este viernes 19 de agosto: “Subí a una buseta que pasa justo al frente de la urbanización donde vivo, en el sector La Piedad- Palavecino, a las 7:50 de la mañana, no pregunté el costo del pasaje pero tras unos metros de recorrido, una usuaria si lo hizo y la respuesta del conductor fue ‘120 bolívares’, ‘y ¿por qué’ dijo la pasajera, ‘si quiere espere la buseta que viene atrás, a ver si le cobra 60 bolívares’, añadió de forma altanera el joven que se encontraba frente al volante”.
Hasta este viernes el costo oficial para esa ruta de transporte es de 80 bolívares, lo que significa que a quienes abordaron esa unidad se les cobró un recargo no autorizado por la Autoridad Metropolitana de Transporte Terrestre (AMTT) de 50%.
“Al escuchar la cifra hubo un murmuro colectivo, pero nadie se bajó por necesidad y porque estaba lloviendo. A mitad de recorrido el colector comenzó a cobrar el pasaje desde la parte posterior hacia adelante (porque era una buseta de las grandes), cada vez que alguien le preguntaba el costo, daba la cifra de forma petulante. Cuando llegó al frente otra señora le preguntó por la publicación de la gaceta oficial y le dijo ‘ya está lista, solo le falta la firma de la AMTT’, a lo que otra persona añadió que eso era falso porque se dice que el aumento posiblemente se haga efectivo en el mes de septiembre”, contó Uzcátegui, al tiempo que añadió que el recorrido desde su lugar de residencia hasta la avenida Lara con Leones fue de más de 40 minutos, trayecto que en un carro particular sería de entre 15 y 20 minutos.
El nuevo incremento en el costo del pasaje estaba previsto por el sector transporte para el 1° de agosto, pero al acercarse la fecha el presidente del Sindicato Automotor y la Federación de Nacional de Transportistas, Erick Zuleta, dijo que darían una prórroga de 15 días al ejecutivo nacional y las autoridades locales para negociaciones sobre el porcentaje. A partir del 15 agosto, se produjo un incremento unilateral de un 100% sobre la tarifa que molestó a los usuarios y generó el pronunciamiento de las autoridades, cuyos funcionarios declararon públicamente la inexistencia de un acuerdo. Pese a ello, los transportistas cobran el pasaje recargado “cada vez que pueden”, dijeron los pasajero consultados por EL IMPULSO.
Salarios rezagados
Alejandro Flores, quien también vive en Cabudare pero labora en Barquisimeto, contó un episodio que vivió la mañana del miércoles en la parada de la avenida Vargas con carrera 22: “estoy de vacaciones pero vine a Barquisimeto a hacer una diligencia, a las 9:30 de la mañana me disponía a ir de regreso a mi hogar, fui a esa parada porque no se dura tanto esperando y se puede viajar sentado, estaba dentro de la unidad junto a otros pasajeros cuando se nos informó que cobrarían 150 bolívares, molestos nos bajamos de la buseta y quedó vacía”.
Junto a otra pasajera caminó hasta la parada de la carrera 18 con calle 21, donde pudo montarse en una unidad que sí le cobró el monto oficial de 80 bolívares. “Nos estaban recargando el 90% sobre el costo del pasaje, esto es injusto, en especial para mi porque soy trabajador de Corpoelec y desde hace años mi salario fue arropado por el sueldo mínimo lo que significa que gano 500 bolívares diarios y esos debo destinar más de la mitad para costear el pasaje que es oficial hasta ahora. Si lo aumentan en esos porcentajes desproporcionados, nose cómo haré porque además donde trabajo se tardan meses para homologar los salarios a esos ajustes anunciados por el Gobierno”.
“Entren que caben 100”
Muchos pasajeros aseguran que viajar en transporte público representa una odisea, una travesía que solo pueden relatar quienes viven la experiencia a diario.
“No es fácil, yo hago esto a diario y hay que llenarse de paciencia, porque debido a la crisis del país se ha reducido el número de unidades y uno debe soportar el calor en trayecto y la lentitud que existe debido a la gran cantidad de personas que suben a las busetas en cada viaje; en cada parada, por cada persona que se baja se suben tres, ese es el promedio”, explica María Carolina Benítez, mientras espera un ruta hacia Cabudare en la avenida Lara.
“En una ocasión me puse a reflexionar mientras prácticamente iba guindando en una buseta para mi casa, era de esas unidades diseñadas para 24 pasajeros sentados, pero allí íbamos no menos de 35 personas pegadas unas con otras y todas sufrimos, los que van de pie deben hacer malabares para no caerse y los que van sentados deben soportar además del calor, los roces y golpes con carteras o bolsos”, describe y continúa: “el precio del pasaje oficial es de 80 bolívares, multiplicado por 35 son 2.800 bolívares que obtiene ese conductor, solo de ida hacia Cabudare y sin contar los pasajeros que abordan la unidad para hacer los recorridos cortos o internos; una vuelta de esa unidad, llena de pasajeros, son 5.600 bolívares, entonces me pregunto ¿cuántas vueltas da al día y cuánto dinero puede generar una sola buseta al día, a la semana y al mes? Estoy segura que es mucho más que lo que ganamos la mayoría de los ciudadanos de a pie”.
Benítez dice que el tema del aumento del pasaje es complejo, “entiendo que para los transportistas tampoco es fácil y sé que la operatividad de las unidades transporte está en riesgo debido a los altos costos de los repuestos y el mantenimiento, pero siento que en esta situación los más afectados somos nosotros los usuarios, sobretodo los que ganamos sueldo mínimo y estamos sometidos a un servicio que además es deficiente”, concluye.
Otro usuario, Jairo Contreras, se quejó de la actitud manifestada por los conductores y colectores, “un amigo transportista, a quien no identificaré, me dijo que en una de las asambleas del sector un conductor le preguntó a Zuleta ‘¿qué hacemos con los usuarios que se molesten porque les cobramos más?’ Y supuestamente la respuesta fue: ‘echense cuchillo con los pasajeros’… todo indica que eso fue cierto, porque los conductores tratan mal a quienes reclaman por el precio del pasaje, he sido testigo de varias disputas”.
El monto exacto
En las rutas internas de Barquisimeto, los reportes de los usuarios indican que se viven situaciones similares. Ana Herrera detalla que debe carga sencillo para cancelar los 50 bolívares exactos del monto oficial del pasaje.
“A principios de la semana los pasajeros que pagaban con un billete de 100 bolívares no recibían vuelto, por eso yo siempre cargo los 50 exactos”.
Orlando Sanchez dijo que fue uno de los pasajeros que se bajó de un Ruta 21, en la avenida Los Leones, porque “pretendía cobrarnos 100 bolívares”.
“Yo he tenido que paga los 100 bolívares, porque me he montado en unidades que cargan una gaceta con el nuevo monto del pasaje, firmada y sellada”, agregó la señora Zaida Martínez.
Otra usuaria, Anney Pérez, expresó que vive en el norte de Barquisimeto y para llegar a su trabajo, en el este de la ciudad, ha destinado alrededor de 300 bolívares diarios esta semana.
“Me cobran 200 bolívares hasta la avenida Vargas y de allá hasta acá, son entre 50 y 100 bolívares adicionales, solo para el trayecto hasta el trabajo. Estoy preocupada, si del salario mínimo vigente y el costo del pasaje anterior solo quedaban 2.000 bolívares libres de mi quincena para otros gastos, ahora no sé cuánto me quedará, ese aumento anunciado por el Presidente tampoco será suficiente”, reflexionó.
