El hermetismo que mantiene el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) con el caso de “El Hombre del Rifle”, es grande, hasta el punto de que guardaban en secreto la detención de una persona. Eso salió a la luz pública tras su presentación ante los tribunales larenses.
José Luis Paradas es el detenido. Ex funcionario de Polilara, fue miembro de la División de Inteligencia de la Policía (DIP). Ahora se encuentra en el anexo de la comandancia de Polilara, detenido e imputado por homicidio calificado y homicidio frustrado, por los hechos ocurridos el pasado 24 de junio, cuando dos personas perdieron la vida y una resultó lesionada, en la avenida Vargas.
Aunque desde el Eje Contra Homicidios del cuerpo detectivesco pudieran dar por culminado o esclarecido el caso, continúan con las investigaciones.
Resulta que no sería una sola persona la que supuestamente anda en la calle cometiendo los crímenes. Es posible que se trate de un grupo que sabe lo que hace. Actúan con calma. Es por ello que a los investigadores no les ha resultado fácil su labor.
Los sabuesos consideran que se trata al menos de tres personas como mínimo, pero dejaron entrever que pudieran ser más. Lo que sí aseguran los expertos en medio de su investigación es que los asesinos suelen bajar la ventanilla del vehículo, y disparan. Es decir, lo hacen desde la parte interna del auto, específicamente desde el asiento trasero.
Aunque en uno de los sitios se colectó una concha de calibre 7.65, una fuente allegada a la investigación comentó que no descartan la presencia del rifle. Están casi seguros de que existe. Trascendió que científicamente los tres casos de la avenida Vargas por el que fue imputado Paradas están relacionados.
“Los expedientes están blindados”, dijeron entre dientes, haciendo referencia al caso, porque la Fiscalía Segundo llevó a cabo su acusación.
Así mismo tienen confirmado que es un Toyota Corolla plateado el que está involucrado en los hechos de la avenida Vargas.
En cuanto al crimen del comerciante Nelson Brizuela, cometido el 9 de agosto en la calle 10 entre 20 y 21, al este de la ciudad, se conoce que guarda relación con los otros homicidios de la Vargas, pero no existen elementos suficientes para una acusación en este hecho.
Las investigaciones las están llevando a cabo al menos 15 funcionarios del Eje Contra Homicidios, dedicados de lleno a resolver este caso. Están apoyados con expertos de Caracas.
Cuatro horas duró la audiencia
La audiencia de presentación de José Luis Paradas comenzó a las 11:00 de la mañana del miércoles y culminó a las 3:00 de la tarde.
Pedro Troconis, abogado defensor, indicó que la audiencia se extendió debido a que se pidieron nulidades en algunas actuaciones a la jueza.
Citó el caso del acta policial presentada, en la que figura una supuesta “confesión” firmada por el hijo de Paradas, asegurando que su padre forma parte del grupo de “asesinos”.
El penalista dice que hubo “torturas” y que ese caso lo tiene en sus manos la Fiscalía 21 con competencia en Derechos Fundamentales, que ya comenzó las investigaciones.
Las otras nulidades solicitadas fueron por tres allanamientos practicados el sábado 13 de agosto. Indica Troconis que uno de ellos se hizo en Tacarigua, en la vía a Duaca, en la casa de un conocido de Paradas, en donde utilizaron un solo testigo. Otros dos en la casa del jefe de Paradas y en la misma casa del ex funcionario, en la calle 20 entre carreras 28 y 29, en donde usaron un testigo cuya cédula de identidad no coincide con sus verdaderos datos en el registro del Consejo Nacional Electoral (CNE), por lo que no sabe si es un testigo “fabricado”.
Todas las nulidades solicitadas fueron negadas por la jueza, pero ahora lo hará formalmente a través de la Sala de Apelaciones.
De la misma forma indicó Troconis que el traslado de José Luis Paradas al comando se hizo entre la tarde noche del miércoles y el día de ayer, cuando debieron trasladarlo a la medicatura forense. Eso no fue posible porque, comentó, su boleta “extrañamente” fue extraviada. Ahora la defensa debe pedir una nueva cita.
Las víctimas tenían antecedentes
Sobre los dos fallecidos de la avenida Vargas, ultimados el 24 de junio, se conoció que uno presentaba antecedentes y el otro “tenía problemas por los vicios”.
En el caso de Oscar José Carreño Rivero (20), quien era charlero, su familia manifestó que era adicto al consumo de drogas y trabajaba en la calle desde que tenía 14 años.
El muchacho residía en la urbanización Macías Mujica.
Mike Nelson Suárez González (55), era taxista.
Estuvo detenido por el delito contra la propiedad, una en el año 98. Otro registro es de 2005.
Cabe destacar que Adolfo Rafael Méndez (25) joven que fue lesionado en esa ocasión es un muchacho con una conducta intachable. Era atleta.
En cuanto a Nelson Brizuela (49), la última víctima, trascendió que tiene en su haber dos registros policiales, ambos por hurto de vehículo, uno del año ‘94, por la subdelegación del Cicpc de Caña de Azúcar, en el estado Aragua, y otro del año ‘97, por parte de la Subdelegación de Barquisimeto, por el mismo delito.