Un fuerte resfriado llevó a Adele a posponer su concierto del miércoles por la noche en Phoenix.
La cantante británica dijo que se había esforzado demasiado la noche del martes en el Talking Stick Resort Arena, en el centro de Phoenix.
Con la voz algo ronca, dijo en su cibersitio que los fans que la estaban escuchando sabían que el espectáculo del miércoles «no sería muy bueno».
«Lo lamento muchísimo. Tuve un resfriado un par de días y estuve forzando (la voz) contra eso», dijo la intérprete ganadora de múltiples premios Grammy.
Los próximos conciertos de Adele están previstos para el sábado y domingo en el Staples Center en Los Angeles.
En el video del miércoles, le dijo a sus fans de Phoenix que reprogramará el recital cancelado.
«Volveré y me luciré ante ustedes», dijo Adele.