A nivel nacional la tolda opositora se movilizó a las sedes regionales del Consejo Nacional Electoral para entregar un documento en donde se expone la preocupación ante la dilatación de los lapsos establecidos para la solicitud del referendo por parte del organismo.
“De manera contundente, queremos expresar nuestro rechazo al injustificado y absurdo retardo que ese ente comicial, ha empleado para tramitar la solicitud de activación del mencionado proceso”, indicaron.
Señalaron además que con estas alteraciones se está violentando no solo el reglamento referente a esta temática, sino además la Constitución, la cual indica que se debe dar respuesta oportuna a las peticiones que tenga la ciudadanía, especialmente cuando se trata de un tema como el revocatorio.
El dirigente de Un Nuevo Tiempo, Orlando Fernández, aseguró que con el pronunciamiento realizado por Tibisay Lucena, presidenta del CNE, se revela que la institución que representa forma parte de “las maniobras del gobierno ya que hay lapsos que cumplir”.
Explicó además, que el referendo es una solicitud hecha por el pueblo que cada día sufre más las consecuencias de las malas políticas gubernamentales que se tienen, de manera que con este proceso se pretende revocar no solo a Nicolás Maduro, sino que con esto se acabe las preocupaciones de los venezolanos.
Para los representantes de UNT, el Gobierno nacional busca crear desesperanza en las personas, sin embargo destacó que esto no lo lograrán por lo que respaldarán de manera rotunda el llamado que se está planteando desde la Mesa de la Unidad Democrática a tomar la ciudad de Caracas el próximo 1 de septiembre, explicando además que se está jugando con candela al no escuchar al pueblo y que el mandatario “se puede quemar”.
Mal parados
Aseveraron que el hecho de que el Gobierno y el organismo electoral, juegue con los lapsos planteados significa un punto negativo a nivel internacional para los mismos, en donde cada día la oposición toma más la razón al señalar el mandato de Maduro como una dictadura ya que este pretende desconocer la voluntad popular.