Las familias de varios sectores de La Ruezga Norte están desesperadas por la indiferencia como desde Hidrolara están tratando el grave e insalubre problema que están confrontando con las aguas negras que corren al lado de sus viviendas.
Las más afectadas son las residentes en la vereda 2 del sector 3 y la calle 10, por donde pasan verdaderos ríos de aguas servidas procedentes de la parte alta de El Jebe.
Blanca Gómez, una de las vecinas de la vereda 2, dijo que como las cloacas están colapsadas, las aguas negras, con olores insoportables, bajan hasta el canal de desagüe, al lado del liceo Carlos Gil Yépez, pero como este se encuentra totalmente cubierto por la maleza, las mismas no corren hasta La Ruezga, como debía ocurrir sino que se empozan.
Indicó que eso ha traído como consecuencias, sobre todo en los niños, brotes de diferentes enfermedades, como diarreas, vómitos, fiebres y hasta sarna.
Afirmó que están cansadas de notificar la novedad a Hidrolara, pero hasta ahora no les han resuelto la situación que cada día es más grave, en especial cuando llueve.
Lo mismo ocurre en la calle 10, que las aguas putrefactas circulan o se empozan al lado de las viviendas, dejando a su paso contaminación entre niños y adultos.
Coromoto Zambrano, preocupada por lo que están pasando, refirió que cuando llaman a Hidrolara lo único que les dicen es, “ya vamos pa’ allá”, pero se quedan esperándoles con las narices tapadas por los malos olores.
Agregó que hace 15 días sí llegó una cuadrilla pero, cuando pensaban que iban a destapar la cloaca obstruida, les dijeron que no cargaban el equipo necesario para la obra.
En vista de que siguen esperando les solucionen el problema, este martes cerraron la calle durante varias horas en señal de protesta.
“Es que ya no aguantamos esta hediondez. Queremos que venga el ingeniero Pedro para que se de cuenta de lo que estamos pasando todas estas familias, que nos estamos enfermando por esa cloaca tapada”, enfatizó Coromoto.