Hola Ciudadano:
¿Cuántas ideas nuevas implementa cada mes el desgobierno? ¿Cuánto tardamos los ciudadanos en saber si es una buena idea? ¿Cuánto tiempo tarda en ponerla en práctica tras exhautivos estudios para cumplir con la frase del pajarito a Maduro: ”Si no eres chavista no eres venezolano”. ¿Cómo motivara la cantidad de ciudadanos en colas, sean de su gente o de la oposición?
Estas preguntas deberían tener respuestas que te llenasen a ti y a tu gente de orgullo. Sin embargo, estoy lo bastante seguro de que salvo que seas un “enchufado” o hayas “vendido” tu alma a lo que pomposamente se llamó socialismo del Siglo XXI –y con Maduro “revolución”, las preguntas habrán provocado una mueca de “qué rabia me da no poder tenerte delante, y… decirte que… estás equivocado” (los puntos suspensivos son mi manea de desahogarme sin ser grosero)
Y si tienes la suerte de ser de los que creen y actúan en la reconstrucción de Venezuela, enhorabuena. «Piensa, actúa, no decaigas en la reconstrucción del país”
El objetivo de este artículo, en el primer domingo de agosto de 2016 en plenas vacaciones, domina mi conciencia el hecho de que antes de desearte el merecido descanso vacacional es dejar una semilla en tu mente. La semilla que te anime a poner mucho más énfasis, a la vuelta de vacaciones, en la transformación de las principales amenazas que pueden acabar con este hermoso país, acabando con un desgobierno mentiroso, tramposo, de mentiras a bocajarro, los robos de dinero público, la burocracia sin fin, la entrega del poder a militares que no saben lo que es “ser ciudadano civil”, la burocracia sin fin, el ego y el miedo de la gente a salir a protestar democráticamente y sacar su mejor versión del venezolano que quiere a su patria Venezuela.
Ante lo que vemos, oímos y soportamos, la responsabilidad mayor la tienen los profesionales y técnicos de las diferentes carreras universitarias, los políticos, los emprendedores, los coaches, los mal pagados y desvalorizados maestros, profesores de secundaria y universidad, a quienes les pido que ¡actúen” para cambiar el desastre a que nos han llevado con el engaño y la ineptitud a todos, sí a “toditos” los venezolanos.
A todos, a “toditos”, independientemente de pertenecer a un partido u otro o a ninguno, pertenecemos a Venezuela, que es lo que debe dominar las emociones poderosas, la ilusión, el entusiasmo, el aprendizaje, la confianza, las ganas de crear y compartir la percepción de la tecnología y de la verdadera política del Bien Común como una gran oportunidad.
A mi me formaron en la “libertad, la democracia y en la política del Bien Común” en Venezuela, desde el momento que puse pie en ella un 24 de Julio de 1954.Tuve magníficos profesores en secundaria y universidad.Nací en Lizarra-EuskalHerría y me siento y soy ciudadano venezolano, a gran honor.
Venezuela era un crisol para el mundo, por su democracia, por su reforma agraria, por sus partidos políticos, por su sistema educativo ejemplo para todos los países latinoamericanos, las Becas Mariscal de Ayacucho, el Proyecto Galileo, el Crédito Educativo Universitario, el Pleno empleo, el hecho de que Rómulo Betancourt dictó un decreto de “disminuir” en un 10% ”el sueldo” de empleados públicos y privados, magníficamente aceptado por los ciudadanos ante el vacío de las arcas llevado a cabo por el dictador Pérez Jimenez, y… miles de cosas más.
En el devenir de los tiempos, los políticos que se asentaron en el poder fueron reculando en la telaraña politiquera y la burocracia, dejaron de formar generación de relevo debido al ego de los directivos, jefes y gobernantes (que no líderes) de partidos e instituciones.
Ciudadano: Ante las violaciones que hace el gobierno y sus lacayos del TSJ, CNE, y militares, ¿te quedarás callado? ¿Tú quieres a Venezuela?
