A las 6:40 de la mañana de ayer se escucharon ocho detonaciones y seguidamente arrancó un vehículo a toda velocidad. Así fue el despertador de los vecinos de la calle 10, entre carreras 27 y 28, al este de la ciudad.
Al salir de sus hogares vieron a un hombre tirado en la calle, cerca de acera. En el momento la víctima aún estaba con vida, pero pasaron unos segundos para que dejara de respirar.
No era conocido en el lugar. Los curiosos se acercaron y expresaban que no era de la zona. Vestía unos zapatos deportivos negros, llevaba jeans azul oscuro, franelilla blanca y una camisa manga larga verde agua, abierta.
No portaba identificación alguna, se le observó un tatuaje en el pecho, cargaba una cadena de plata y en ambas manos un anillo del mismo metal. Así mismo se le apreció una pulsera de hilos roja y otra de canutillos verde y amarilla.
No hubo doliente alguno. A un metro de su cuerpo estaba una concha, la cual fue colectada por funcionarios del Eje de Homicidios del Cicpc como evidencia.
Se le apreció un impacto en el brazo y otro en la pierna derecha, ambos causados por un proyectil.
Su cuerpo fue levantado y trasladado a la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda, en donde fue ingresado sin identidad alguna porque al momento de su hallazgo no portaba documentación alguna.
Horas más tarde la víctima fue identificada como José Pastor Colmenárez Rojas, de 26 años de edad, residenciado en Santo Domingo, al oeste de la ciudad. Trascendió que fue buscado en su casa la mañana de ayer, al parecer por personas conocidas.
Sabuesos investigan el caso para determinar qué hacía ese joven a esa hora en el lugar y poder determinar con quién andaba y quién haberle dado muerte.
