La canciller venezolana Delcy Rodríguez, consideró como «patadas de ahogado» la negativa de Brasil y Paraguay a que su país asuma la presidencia rotativa del Mercosur, señalando que es impostergable.
«Eso es lo que se llaman patadas de ahogado. Es imposible que no se pueda respetar el cumplimiento del tratado» constitutivo del bloque regional, declaró Rodríguez telefónicamente desde Portugal al canal de televisión Telesur.
Brasil y Paraguay rechazan que Venezuela asuma la conducción del grupo -que cada socio ejerce por seis meses- debido a la crisis por choque de poderes que sacude al país petrolero.
Una reunión de cancilleres prevista para el sábado en Uruguay para acercar posiciones fue cancelada, agravando la situación del bloque, integrado además por Argentina.
La ministra venezolana señaló que los estatutos del Mercosur solo establecen dos condiciones para traspasar la presidencia: que el país que la ejerce -en este caso Uruguay- haya completado su período- y que la sucesión se dé por orden alfabético.
Por tanto, «debe ser transferida sin ningún tipo de retardo, sin ningún tipo excusa, a Venezuela», subrayó Rodríguez, de visita en Lisboa.
Denunciando que el caso pretende ser mediatizado «política e ideológicamente», la canciller llamó a mantener la «unidad» del mecanismo, para lo cual consideró necesario que el traspaso se realice «de forma automática».
Venezuela, el país con las mayores reservas petroleras del mundo y último en ingresar al bloque, está enfrascado en una crisis política y económica, marcada por la colisión permanente con el Parlamento de mayoría opositora.
