El equipo de ciclista de ruta Fundación Ángel Pulgar, después del destacado quinto lugar firmado con Aníbal Natera en la reciente Vuelta de la Juventud, alista sus pedales para hacerle frente a otras dos competiciones de envergadura y a las que acudirá con aspiraciones de hacerse un lugar dentro del podio.
El equipo crepuscular tiene programado asistir a la Vuelta a Paria en septiembre y a la Vuelta al Zulia en noviembre, dos pruebas por etapas que se ajustan a las condiciones de sus ruteros, debido a que son esencialmente en terreno plano y entran dentro de las posibilidades atléticas de corredores como, por ejemplo, José Ramos, quien, de hecho, irá a la ronda de Coquivacoa en rol de campeón defensor.
Recientemente, el escuadrón crepuscular, que tiene vivo el espíritu del pedalismo de ruta crepuscular después de un tiempo de indiferencia total de parte de entes gubernamentales y empresarios locales, se perdió la disputa de la Vuelta a Venezuela, por carecer de presupuesto para costear los gastos de hospedaje, alojamiento, alimentación, hidratación y equipamiento de material deportivo, pero pasa la página rápidamente y se centra en los compromisos que se avecinan, de tanta o mayor importancia que el giro nacional.
Además, ya tienen recuperados a los pedalistas que padecieron problemas de salud en tiempos recientes y están listos para ir en busca de protagonismo, como los casos del citado Ramos, jefe de filas de la escuadra, y Enrique Nieves, el hombre fuerte a la hora de los embalajes masivos.
Los dirigentes esperan mantener el apoyo de las instituciones patrocinantes, como la alcaldía de Iribarren, que les entregó un aporte de 2 millones de bolívares, que les ayudará a cubrir los gastos de las carreras por disputar.