“No es una decisión fácil, todavía la estamos discutiendo”. Así respondió Ender Luzardo, presidente del Deportivo Lara, cuando le fue interrogado, sobre las nueve de la noche del lunes, la decisión de la junta directiva en torno a la renuncia presentada por el entrenador José Alí Cañas.
Luzardo sostenía una reunión con Jorge Giménez y Silvio Ochoa, los empresarios que recientemente se hicieron socios de la franquicia, al adquirir el 50 por ciento de las acciones, y que por ende, tienen arte y parte en la toma de decisiones.
“Estamos discutiendo muchos temas y el del técnico es uno de ellos, pero ese tema lo dejamos de último para hacer una evaluación correcta y no tomar una decisión a la ligera”, advirtió Luzardo, en conversación telefónica. “Mañana (hoy) tendremos una decisión”, adicionó.
Al parecer, entre los accionistas existía una especie de disyuntiva, porque un sector levantaba la bandera de la continuidad y el otro quería refrescar la dirección técnica. La discusión, entonces, pasaba por la prudencia y las implicaciones de aceptar o no la decisión de Cañas, quien puso el cargo a la orden la noche del domingo, luego de la inesperada y bochornosa derrota ante Petare, 0-2, en campo propio.
Luzardo es quien abogaba por el espaldarazo. En la etapa de Rafael Dudamel vivió una situación similar y siempre mostró confianza en el DT, y luego sacó rédito a su apuesta, porque el equipo llegó a la final de la Copa Venezuela del año pasado y clasificó a la Sudamericana. Pero en el otro sector abunda la preocupación, visto lo cercana que se ha puesto la oncena de la zona de descenso y consideran que es pertinente un cambio.
¿Quién dirige en Copa?
Puede que al amanecer de este martes -si anoche había una decisión de la directiva- Cañas esté haciendo maletas para irse a su casa y un DT interino tomaría las riendas de los entrenamientos para preparar estrategias de cara al partido de mañana contra la Academia Puerto Cabello, en los dieciseisavos de final de la Copa Venezuela.
La tarea no luce nada sencilla. Quien asuma el reto de dirigir ese partido sabe que hay muchas probabilidades de salir con las tablas en la cabeza, porque el equipo larense -que ya sufrió en la ida con su rival de turno, de segunda división- no atraviesa un buen momento y seguramente se verá afectado por la situación que rodea a la renuncia de Cañas.
La pregunta del millón es, ¿quién sería ese técnico interino en caso de que Cañas ya no sea el entrenador? Hay que buscar dentro del mismo equipo, porque no hay tiempo para buscar uno afuera. Y entonces, surgen como opciones Luis Bueno hijo, quien funge como asistente de Cañas, pero es ficha del equipo y seguiría en la oncena, esté o no el merideño. La otra opción es la de Edgar Torrealba, contratado hace un par de semanas como DT de la sub20 del rojinegro y que cuenta con un poco más de experiencia.
Sin embargo, fuentes con conocimiento de la situación señalaron que Torrealba no había sido contactado por la directiva para la tarea de interino y, por el contrario, seguía en la planificación de la semana con la oncena juvenil. Entonces, sería Bueno el hombre asignado a la tarea de buscar la clasificación a la siguiente fase de la Copa Libertadores.
Suena Leo González
El nombre de Leo González, extécnico de Trujillanos y La Guaira, circulaba como posible reemplazo de Cañas, pero no es una versión confirmada ni negada por la directiva, porque “primero hay que definir lo de Cañas” para ver cuál es el siguiente paso, de acuerdo con lo señalado por Luzardo.
