El grupo denominado Médicos Unidos de Venezuela, cuyos integrantes, preocupados por la crisis de la salud que está afectando al país desde hace algún tiempo, continúa organizando actividades hacia la solución de la misma.
En tal sentido, mañana a las diez, en la Santa Iglesia Catedral, se oficiará lo que han denominado, Misa de las Batas Blancas, destinadas a pedir la intervención divina para que reaparescan las medicinas necesarias en la curación de las personas enfermas.
El doctor José Disarli, del grupo, informó que al evento católico, además de los médicos, se espera asistan enfermeras y enfermeros, bioanalistas, laboratoristas, personal administrativo de centros de salud, y público en general.
La misa solemne será oficiada por el cura párroco de Catedral, aunque no se descarta también la asistencia del arzobispo de Barquisimeto, monseñor Antonio López Castillo, quien siempre está presto a participar en toda actividad por una buena causa, como esta, de llamar la atención de quienes están en el gobierno Nacional sobre la grave situación que están confrontando quienes tienen la desgracia de padecer alguna enfermedad.
Como se ha venido denunciando, en Venezuela existe desde hace tiempo un serio desabastecimiento de medicamentos, así como soluciones, químicos para laboratorios, equipos de imágenes y de otras índoles, necesarias para el normal funcionamiento de hospitales y clínicas privadas.
El doctor José Disarli dijo que durante el oficio religioso de este domingo, oficiantes y participantes en general elevarán oraciones a Dios para que Venezuela vuelva a la normalidad en cuanto a la prestación de salud en las instituciones destinadas a tan indispensasble servicio.
La Misa de las Batas Blancas se característica de asistencia de los profesionales con sus vestimentas de trabajo.