Dos homicidios se registraron este miércoles, uno en el este de la ciudad y otro hacia la zona oeste.
El primer caso fue el de un adolescente de 17 años, estudiante de segundo año de bachillerato, quien presentaba problemas auditivos, además de tener la cuarta parte de las neuronas dormidas.
Su madre, Elianet Méndez, indicó que ella se gana la vida como comerciante y todas las tardes sale a la calle a trabajar para mantener a sus seis hijos. El adolescente de 17 años era el mayor de ellos.
“Es un muchacho inocente, fácil de manipular. Otro joven a quien conocen como ’Cabrita’ me lo buscaba todos los días y el martes precisamente lo corrí, le dije que no lo buscara porque me lo dañaría”, comenta la mujer en medio del llanto.
Su tía, Yorjana Méndez, explica que el adolescente almorzó con ella a la 1:00 de la tarde y ella salió, pero supo que media hora después “Cabrita” también de 17 años y otro jovencito de 15 años, lo fueron a buscar para divertirse con los videos juegos.
Los tres jóvenes se fueron hasta la casa de “Cabrita”, ubicada en Tierra Negra.
Este joven sacó el arma de su padre, comenzó a manipularla, y la accionó. El proyectil le dio en el rostro al adolescente, quien cayó sin vida en el cuarto.
“El Cabrita” y el otro jovencito de 15 años le quitaron los aparatos auditivos que usaba la víctima, y se llevaron el arma, la cual ocultaron en un monte.
Al finalizar la tarde se consiguió el cuerpo del jovencito y a las 7:00 de la noche sus familiares se enteraron de lo sucedido.
Una comisión del Eje de Homicidios acudió al sitio y aprehendió a los dos adolescente. Además localizaron el arma involucrada en el crimen.
En oeste
El segundo crimen fue a las 10:00 de la noche, cuando de múltiples impactos acabaron con la vida de Jonathan Alí Rodríguez López (35), en Pilade de Montezuma. La víctima fatal residía en Agua Viva El Roble, al oeste de la ciudad.
