Es un jovencito de tez blanca, delgado, cabello castaño claro, con sus ojos marrones y bigotes escasos. Su aspecto es el de cualquier adolescente. Vestía una camisa manga larga de cuadros rojo y azul, pantalones blue jeans. Estaba bien combinado.
Pero no es cualquier adolescente. Se trata de “Janiel”, quien es buscado por los diversos cuerpos de seguridad en la ciudad, por ser el supuesto líder de Las Sábilas.
Tiene 17 años de edad, y en lugar de estar pendiente de sus estudios, las novias y las fiestas, se mantenía escondido porque temía por su vida.
A su corta edad ya las autoridades lo tienen fichado en al menos cinco expedientes de homicidio y según su familia lo involucran con todo lo que pasa en dicho urbanismo, considerado como el más peligroso de la zona norte.
Se entregó
A las 8:00 de la mañana de ayer “Janiel” llegó acompañado de su madre, hermanas, tías, primos, algunos vecinos y el abogado Alí Sánchez. Se presentó en la sede del Ministerio Público que está ubicada en la carrera 17 con calle 27; allí ubicaron a la Fiscal 13 con Competencia Penitenciaria, a quien contactaron para que el muchacho se entregara.
Una vez en el lugar fue remitido a la Fiscalía de Menores, que lleva las causas; específicamente con la Fiscal 19, Carolina Sierra. Posteriormente fue enviado al Edificio Nacional, para ser atendido en los tribunales. Su audiencia fue pautada para las 3:00 de la tarde, porque presentaba una solicitud por el delito de homicidio de fecha 19 de julio, explicó Alí Sánchez, el abogado defensor.
“Nos acosan”
Totalmente acosados se sentían “Janiel” y sus familiares, quienes indican que su fama se la dieron ciertos medios de comunicación y es que no entienden cómo lo involucran con todo lo malo que pasa en Las Sábilas.
Yomaira Rivas comenta que comenzaron a vivir un terror con su hermano desde principios de 2015, cuando varios cuerpos de seguridad los comenzaron a rondar, buscando a “Janiel”.
“Se metían a la casa de mi mamá cada vez, nos llevaban todo, nos tumbaban todo y nunca lo encontraban. Si estaba algún vecino mirando también era víctima de esos allanamientos sin orden, y se cansaban de amedrentarnos”, explica Rivas.
La mujer comenta que en reiteradas ocasiones el adolescente quiso entregarse para no someter a su familia a tal sufrimiento, pero ellos no lo dejaron. Indica que hasta su casa en Barrio Lindo y la de la abuela en la Ruezga Norte, fueron visitadas por los funcionarios.
Uno de los organismos que más acosaba a la familia es la Policía Nacional Bolivariana (PNB), destacados en Alí Primera. Denuncian que al menos un grupo de ocho funcionarios entre los que figuran los tres detenidos días atrás en Duaca, acudían a Las Sábilas en la misma patrulla P-30 y tenían por costumbre extorsionar a “Janiel”.
“Teníamos que vender los peroles, pedir prestado a amigos y familiares, para pagar lo que estos hombres pedían”, exclama la hermana.
Otro familiar indicó que las tarifas eran variadas, dependiendo de quien se acercara. Lo que sí era seguro es que cada vez que les “caían” en sus casas se llevaban los teléfonos celulares, buenos o malos.
Lo que hizo decidir a la familia y apoyar a “Janiel”, quien es el menor de cuatro hermanos, en su determinación de entregarse, fueron las últimas incursiones de los uniformados.
omentan las mujeres que al no conseguir al adolescente se las llevaban a ellas y a su madre para ser interrogadas durante horas, en ocasiones el día entero. Según ellas fueron víctimas de “psicoterror”, porque les indicaban que si “Janiel” no se entregaba acabaría muerto.
Amenazaban con “sembrarlo” y de una u otra forma hacerle daño al joven.
Toda su vida cambió hasta el punto de que “Janiel” tuvo que irse de casa de su madre para protegerla y una vez que la familia dio el visto bueno, el adolescente se preparó y se entregó. Sánchez, abogado defensor, indica que los procedimientos no se han hecho como deben ser y a pesar de que desde la mañana se encontraban en tribunales faltando una hora para la audiencia, no había tenido acceso al expediente.
Cinco homicidios
Funcionarios del Eje de Homicidios del Cicpc estaban al tanto de dicha entrega y aguardaban la audiencia, para ellos materializar la captura del adolescente, quien figuraba entre los más buscados.
Los sabuesos han realizado sus pesquisas y lo tienen mencionado en cinco crímenes, todos cometidos en este año. El primero fue el 7 de febrero en la vereda 12 Manzana X de Las Sábilas, en perjuicio de Jhonny Jesús Perozo (29), conocido como “Nené”. Este hombre fue asesinado por incumplir las normas que supuestamente impuso “Janiel”: no debían robar ni desalojar a nadie del mismo barrio.
El segundo crimen fue cometido el 31 de marzo en contra de una adolescente de 16 años, a quien encontraron sin vida en Cardonal. Por este hecho fueron apresados “El Maracucho” y “El Viejo Freddy”.
El 4 de abril supuestamente ultimó al sindicalista Víctor Alexander Capdevilla Sangronis (40) en la vía Cordero, específicamente en El Trapiche. En este hecho habría actuado “Janiel” junto a “El Pelón” y “El Pitillo”.
El 26 de ese mismo mes, le quitaron la vida a Dixon José Mora Cortez (26). Aunque era miembro de la banda, fue ejecutado porque pensaron que los estaba delatando con la policía.
En el último homicidio en el que se menciona al adolescente es el de Robinson Raúl Flores Veliz (43), asesinado el 29 de junio en horas de la noche, en la esquina de la calle 6 de la Manzana F, en Las Sábilas. La víctima fatal era paramédico y en ese momento familiares indicaron que la mujer que estaba frecuentando el hoy occiso tenía amistad con delincuentes de la zona.
Aunque sus familiares indican que el joven es ”tranquilo”, no hacía más que estar en su casa y ver televisión, situación que es constatada por los vecinos de la C, sin embargo otros residentes de Las Sábilas que temen identificarse por sus vidas, aseguran que él comandaba a todos los hombres de dicha urbanización, pese a ser menor de edad.
Los residentes de la zona aseguran que el acuerdo de paz que habían realizado en el mes de febrero fue roto por el aludido y comenzaron a sacar a muchas personas de sus casas. Les pedían que dejaran sus enseres y se apoderaban de cada una de las moradas.
Así mismo manifiestan que actualmente estaba refugiado en la Manzana A, en casa de una tía, aunque su familia indicó que no estaba en Las Sábilas.
