El I Festival Internacional de Tango organizado por la compañía Tango Kambalache será el punto de encuentro de bailarines mexicanos, caraqueños y barquisimetanos desde este jueves 21 de julio y hasta el domingo 24.
Para los días 22 y 23 fueron programadas dos milongas, como se le conoce al lugar donde los seguidores de este género se reúnen a bailar y también es el término para definir al ritmo “madre del tango”, más alegre y menos sobrio que el tradicional, como lo explicó el bailarín de la institución organizadora, Jesús Aranguren,
Ambas serán en Transcendencia Sala Experimental, ubicada en la urbanización Copacoa de Cabudare.
En las milongas los espectadores podrán comprobar el talento creciente en el estado en la práctica de tango, especialmente, el de los niños aspirantes a ser profesionales del tango salón, la modalidad más regia de este género.
También, podrán disfrutar de las presentaciones de los bailarines adolescentes entre ellos el subcampeón en el género tango salón del Word Tango Championschip Medellín 2015, quien a sus 14 años se proyecta como uno bailarín con una carrera copada de éxito. Los profesionales completarán la gala con sus rutinas de tango escenario, caracterizado por las coreografías cargadas de emotividad y piruetas, como lo describió el Aranguren.
El cierre será, el domingo, en el Teatro Juárez, donde exhibirán sus destrezas la pareja mexicana de la escuela Durango, Jasel Bermúdez y Daniel Hipólito. Los caraqueños Siulhy Santander y Leonel Colina harán lo propio en representación del talento criollo junto con los 15 integrantes de Tango Kambalache.
Al final de la jornada, prometió Aranguren, el público quedará prendado porque fue un montaje concebido para el disfrute de toda la familia. Por eso, quienes se interesen pueden consultar las redes sociales Tango Kambalache en Facebook, @escueladetangok en Twitter y @tangokambalache en Instagram para conocer detalles sobre la venta de entradas.
Metas
El espectáculo, dijo Aranguren, esperan repetirlo anualmente y complementarlo con una gira por los principales teatros del país como el Teresa Carreño en Caracas, el César Rengifo o el Tulio Febres Cordero de Mérida y el Aula Magna de la Universidad Rafael Urdaneta en Maracaibo.
Para que este deseo y el resto de los proyectos se cumplan, pide el apoyo de la colectividad larense, pues se trata de un grupo de niños y jóvenes ocupados en aprender un oficio que más allá de ser recreativo les enseña a ser disciplinados, educados y responsables en todos los aspectos de la vida.
“Los jóvenes estamos haciendo algo muy bueno con nuestro tiempo libre. Estamos bailando y no lo estamos haciendo con cualquier género sino con una danza que además de enseñarte a bailar te enseña a caminar, cosas de la vida cotidiana, hasta escuchar mejor, a ser pacientes y todo lo que tiene que ver con tu cuerpo”, afirmó Aranguren.
