Desde el año 2015, se anunciaba que las famosas gargantillas volverían a causar revuelo en la moda y ¡así fue! Durante los últimos meses se han convertido en la tendencia para resaltar cualquir outfit como un accesorio de belleza para el cuello, que más allá de concebirse como minimalista, ha superado las espectativas encontrándose en el mercado desde finos nylon plásticos negros hasta gruesas cintas de oro. Los populares “collares de perro que simulaban tatuajes en el cuello” han quedado atrás y ahora los chokers son utilizados por muchas personas, incluyendo las celebridades demostrando ser un complemento que saca de apuros en cualquier momento
Los estilos para combinarlo, los hacen aptos para escotes plunging o V pronunciados, cuellos barco, o los básicos descubiertos en camisas que deben seguir tendencia según el color y tipo de vestuario.
Cuello Redondo
Sin superar el escote, puedes utilizar un choker con colores metálicos que resalten ese espacio de tu piel, tomando en cuenta el color, tipo de tela y ocasión de la salida.
Strapless
Lucen de maravilla y su ventaja es que puedes combinar varios chokers finos o uno grueso para agregarle modernidad a tu look. Los asimétricos o de estilo simple resultan elegantes para este tipo de vestuario.
Es válido utilizar un straple con chaquetas, blazer o algún fino sueter que denote más formalidad. Sin embargo, recuerda no agregar zarcillos muy grandes que puedan resultar asimétricos… al menos que quieras parecerte a Katy Perry.
Cuello V
Es uno de los más dinámicos para combinar. Desde algunos más holgados o uno ajustado combinado con un collar largo están a la moda y lucen juveniles.
Cuello Cuadrado
Al tener esta forma, agregar accesorios redondos o hexagonales pueden crear un buen balance, al igual que añadir dijes de un tamaño proporcional para armonizar el cuello con la blusa y el rostro.
Tortuga y Halter
No son los favoritos, un choker con camisas cuello de tortuga puede no lucir atractivo, distiguirse o hacerte sentir recargada, pero si luces un color neutro y quieres dar un toque de color puede funcionar. En el caso del cuello halter, usualmente estas prendas de ropa en la parte superior simulan un collar, por ello no es recomendable agregar otro.
Las Telas
Para el uso diario, comprar en una mercería para acceder a este accesorio es la forma más sencilla. Los encajes son algunas de las más empleadas, económicas pero elegantes especialmente las de color negro; así como las cintas de raso con colores mate.
El cuero
Acompañado de dijes, piezas de hierro o metal, los chokers de cuero son de los mejores para el diario, sea de noche o de día que se combinan con un vestuario deportivo, casual o formal.
Balance con tu cabello
Si vas a llevar el cabello suelto, opta por un collar delicado, los estilos simples lucen mejor con el cabello texturizado. De la misma forma, si quieres llevar un modelo más recargado, con perlas o listones, pon en práctica tus conocimientos de trenzas y recogidos.
Choker Tops
Estampados, lisos, de gamuza o con piel, estos choker acompañan a una blusa de la misma tela al estilo off shoulder o “hombres descubiertos”.
Lo que no sabías…
A partir del año 1789 durante la Revolución Francesa, las mujeres empezaron a convertir en una moda utilizar cintas de color rojo en el cuello o en forma de X por el cuello y los hombros, para rendir homenaje a las personas que fallecían en la guillotina.
Durante 1863 algunas pinturas dejaron reflejada la condición de mujeres que usaban cintas negras con varias vueltas alrededor de su cuello. Tal evidencia puede ser apreciada en Olympia, un cuadro realizado por el pintor francés Édouard Manet.
No obstante, en el año 1874 el pintor francés Edgar Degas, retrató a muchas bailarinas consideradas damas modernas de la época con este accesorio.
A finales de los años 1800, esta moda comenzó a vincularse con la realeza cuando la Princesa de Gales usó perlas con tela de terciopelo para cubrir una cicatriz. En esta época el término collar de perro o “colliers de chien”, se hizo popular y estos diseños eran reconocidos como objetos de la élite porque los mejores de ellos eran hechos a la medida.