Apenas tres años de vida útil se estima para el cementerio del oeste, dijo Humberto Agudo, director de Servicio Comunitario de la alcaldía de Iribarren.
De al menos 40 hectáreas fue despojado el terreno desde que se construyó lo que sería el nuevo terminal de pasajeros, disminuyendo el espacio y por lo tanto, los servicios del mismo.
En vista de esto el director de servicio comunitario dio a conocer la creación de dos nuevos cementerios en diferentes zonas del municipio.
“Para el próximo año se quiere tener uno en El Cují, no vamos a esperar que se acabe el espacio en el del oeste para resolver”, dijo Agudo, quien agregó que el otro se establecería en Pavia.
Explicó que en este “proyecto más digno” se buscará que los mismos tengan un espacio considerado, que rinda su vida útil pero que a la vez no sea de difícil manejo. “Máximo tendrán 25 hectáreas para permitir que haya patrullaje y la situación no sea igual que en los cementerios actuales”, dijo.
Asimismo se dio a conocer la recuperación y mantenimiento de los otros espacios que existen en el municipio de este tipo. 60 millones de bolívares están siendo invertidos para podar, pintar y adecuar las instalaciones.
Además aseguró que uno de los principales problemas que tienen los cementerios es referente a la seguridad en los mismos, dada la amplitud del lugar; lo que permite que se generen profanaciones y otros actos vandálicos y delictivos.
Desde el lunes de esta semana se inició con este operativo, en el cual también está contemplado la demolición de la famosa “morguecita”, en el cementerio nuevo, para construir un espacio más adecuado.
Igualmente la cerca del cementerio de Tamaca fue tumbada en su totalidad para crear otra forma de salvaguardar el área.
Esta y otras reparaciones serán realizadas a lo largo de los próximos seis meses que contempla esta primera etapa. Se espera que para el mes de noviembre, los familiares al visitar los camposantos se encuentren con un lugar diferente, más adecuado para mantener a quienes permanecen sepultados.