Más de 35 mil venezolanos cruzaron el pasado domingo la frontera con Colombia para adquirir productos de primera necesidad en situación de escasez, según datos del Plan Frontera para la Prosperidad del vecino país.
El suceso, encarna múltiples connotación y una de ellas es la crisis humanitaria que atraviesa Venezuela. Así lo expresaron expertos y representantes de diversos sectores.
Roberto León Parilli, presidente de la Alianza Nacional de Usuarios y Consumidores (Anauco), por ejemplo, manifestó que lo ocurrido es una “clara muestra de que los derechos de los consumidores, incluyendo el de la vida, alimentación y salud, han sido vulnerados”, puesto que, no sólo no existen bienes suficientes y de calidad, sino que la capacidad de compra se ha visto mermada, lo que impacta directamente en la calidad de vida.
Apuntó que el problema en Venezuela no han sido los precios en sí, ya que los mismos venezolanos cruzaron la frontera para adquirir productos por encima del valor regulado en Venezuela. Por el contrario, la traba han sido las políticas económicas.
Quienes pasaron a Colombia con Bs. 20 mil, poco más de un salario mínimo mensual, recibieron un billete de 50 mil pesos colombianos. Sólo un litro de aceite, debieron pagarlo en 4.000 pesos, equivalentes a Bs. 1.600.
Este día el peso se tranzó a Bs. 291 estimado, por lo que el paquete de 12 rollos de papel higiénico se pagó en Bs. 6.000, la harina de maíz precocida entre Bs. 800 y Bs. 1.125, la pasta entre Bs. 1.040 y Bs. 1.280 y la margarina en Bs. 880.
León Parilli explicó que la crisis venezolana radica en la destrucción del aparato productivo, que cada vez lleva menos productos al mercado. Los sectores se han visto afectados por controles como el de precio y de cambio, que “no garantizan bienestar ni acceso oportuno a productos como alimentos y medicinas”, expresó.
En opinión del presidente de Anauco, las medidas económicas, que no controlan la inflación, son las verdaderas causantes de la problemática y el más afectado es el venezolano. “El gobierno no soluciona la crisis, la administra”.
“Lo más importante para el consumidor en esta crisis, es localizar el producto, el costo y si es justo o no ha pasado a segundo plano”, manifestó para luego expresar que el venezolano ha reducido y cambiado sus costumbres y consumos.
No sólo alimentos
Además de los alimentos y medicinas, algunos venezolanos cruzaron la frontera para adquirir repuestos y autopartes para los vehículo. Así lo expuso la diputada por Táchira, Laidy Gómez.
Al respecto, Alí Almao, presidente de la Cámara de Importadores y Distribuidores de Repuestos Automotrices de Lara, señaló que el cierre de la frontera colombo-venezolana, afectó gravemente al centroccidente del país.
-Por Colombia se abastecía al menos el 10% de la demanda, pero ahora ni siquiera contamos con esos repuestos. Que hayan abierto la frontera por unas horas, representó una solución para algunos venezolanos.
Expresó que el parque automotor en Venezuela es de más de cuatro millones de vehículos.
Desmantelada la tesis oficial
Para el politólogo, Doriam Vázquez, abrir la frontera con Colombia por unas horas, no sólo es contrario a las razones expuestas para justificar el Estado de Excepción, entre estas el contrabando de extracción, o demuestra la grave crisis económica. También “queda evidenciado, a los ojos del mundo, el poco dinamismo de la economía venezolana y los efectos negativos de centralizar y controlar todo cuanto se hace en el país”.
En opinión de González esto impactará negativamente en la opinión pública internacional y podría incidir en la decisión de la Organización de Estados Americanos (OEA) de aplicación de la Carta Democrática, ya que uno de los fundamentos para su solicitud ha sido la crisis humanitaria, este día evidenciada.
-Y aunque se niegue y se calle con ideología, habla el pueblo y habla la calle.
Considera probable que en lo próximo se abran otros canales humanitarios, para calmar el estado de desesperación de la población.
