Por hora y media dos trabajadores de una constructora estuvieron atrapados bajo la tierra, y cuando fueron rescatados, estaban descompensados y lesionados.
Desde hace un mes, los trabajadores de dicha constructora fueron contratados por la Gobernación del estado Lara, para realizar la sustitución de tubería de cloacas en la calle Turén con Ramírez, de Santa Rosa, ubicada justo detrás del Museo de la Divina Pastora.
En el lugar se encontraban José Fernández de 40 años y Ricardo Galíndez 56 años, quienes se introdujeron a la zanja en donde se estaban haciendo las reparaciones. Afuera estaba el plomero Máximo Pineda, junto con el operador de máquinas. De pronto se escucha un golpe y es que la tierra que estaba afuera rodó hasta el hueco y tapo a Fernández y Galíndez.
Pineda indica que trataron de auxiliarlos pero no pudieron, la tierra los tenían hasta la cintura.
Eran las 10 de la mañana cuando ocurrió el hecho y al lugar llegaron funcionarios del Servicio de Emergencia 171, Protección Civil y del Cuerpo de Bomberos de Iribarren, quienes comenzaron con su labor.
Explicaron que la tierra estaba humedecida producto de las últimas precipitaciones de lluvia y esto fue lo que produjo el deslizamiento.
Alrededor de una hora se extendió el trabajo de los funcionarios y lograron alcanzar a Fernández. Lo tuvieron que sacar acostado, se quejaba de un fuerte dolor en la pierna, de igual forma fue inmovilizado.
“Como está el puré”, decía Fernández a la vez que arrugaba su rostro por los dolores que sentía.
El sitio estaba lleno de curiosos y en el momento que sacaron al primer obrero comenzaron a aplaudir a los uniformados.
Aunque los trabajadores eran atendidos de forma paralela, Galíndez estaba más enterrado y además, una piedra grande había caído sobre él. Lo colocaron oxígeno porque estaba descompensando.
Al menos 20 minutos pasaron cuando pudo ser rescatado de la tierra. Los aplausos y emoción invadió a los presentes.
Galíndez salió caminando a las 11:21 de la mañana de ayer, pero de inmediato fue acostado y revisado por los paramédicos. Presentaba el torax rojo por la hora que estuvo aprisionado.
Ambos obreros fueron trasladados hasta la emergencia del Hospital Central Antonio María Pineda, para ser evaluados.
Los residentes de la zona indicaron que fueron muy efectivas la respuestas de los funcionarios quienes no abandonaron a los trabajadores hasta que lograron sacarlos con vida del lugar.