Considerado para muchos latinos como un santo, el doctor José Gregorio Hernández, murió un 29 de junio de 1919, cumpliéndose este mes 97 años de aquel accidente en una calle de Caracas, cuando una carro lo impactó y al caer sufrió un golpe directo a la cabeza.
Nació en Isnotú, estado Trujillo, el 26 de octubre de 1864, por lo que falleció a la edad de 54 años. Ejerció, además de la medicina, como profesor, científico y reconocido filántropo.
Hernández, es recordado por prestar ayuda médica a las personas de bajos recursos, demostrando su generosidad, humildad, rectitud y pasión por la iglesia católica.
En 1986, el Papa Juan Pablo II, declaró solemnemente sus virtudes heróicas, motivo por el cual en la actualidad se encuentra en proceso de beatificación para posteriormente ser canonizado, pese a que muchas personas, no solo venezolanos, sino también ciudadanos de otros países, lo consideran un santo.