Canadá eliminará el requisito de visado para visitantes mexicanos a partir de diciembre de 2016, mientras que México acordó abrir las puertas de su mercado a la carne de res canadiense.
El primer ministro Justin Trudeau hizo el anuncio el martes junto al presidente mexicano Enrique Peña Nieto, quien está en Ottawa para reuniones bilaterales previo a la cumbre trilateral en la cual también estará el presidente de Estados Unidos Barack Obama.
«Compartimos ciertos valores, metas y ambiciones», expresó Trudeau, enfatizando que Canadá y México buscan «tomar medidas que realmente afecten la vida de la gente común».
El gobierno anterior de Canadá, con el Partido Conservador, impuso el requisito de visado en 2009, al argumentar que era necesario para evitar miles de solicitudes de asilo hechas por ciudadanos mexicanos. El requisito tomó desprevenido al gobierno mexicano y era un importante tema de fricción entre ambos países.
El Partido Liberal prometió durante la campaña electoral el año pasado que el requisito de visa sería eliminado, pero el proceso ha estado plagado de demoras.
Trudeau dijo también que los dos países acordaron cooperar estrechamente en asuntos relaciones con sus poblaciones autóctonas.
Peña Nieto asistirá la tarde del martes a un evento de organizaciones juveniles en el Museo de la Naturaleza de Canadá, antes de asistir a una cena de estado en el Rideau Hall.
Trudeau fue anfitrión el lunes a la noche de un banquete en honor al presidente mexicano en Toronto, donde el líder canadiense indicó que ambos gobernantes hablarán sobre cómo mejorar el flujo de personas y productos entre sus dos países.
En Washington, una fuente de la Casa Blanca dijo el lunes que la cumbre a realizarse el miércoles se centrará en un acuerdo entre los países norteamericanos para reducir las emisiones de metano y develar una iniciativa común para cuidar las condiciones climáticas, preservar las fuentes de energía limpia y proteger el medio ambiente.
La cumbre entre los tres países debió realizarse el año pasado pero fue cancelada debido a la disputa sobre el oleoducto Keystone XL entre Canadá y Estados Unidos, y por la polémica en torno a la exigencia de visas.