El Ministerio Público acusó a cinco policías del estado Falcón por su presunta responsabilidad en la muerte del detective del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), Andrés Castro Molina, quien recibió varios disparos el 26 de junio de 2015, en una sede del Instituto Nacional de Transporte Terrestre, ubicada en Coro.
Los fiscales 76º nacional y 17º auxiliar de ese esa entidad, Alejandro Méndez y Ángel García, respectivamente, acusaron a un supervisor agregado, a un supervisor y tres oficiales, por ser presuntos coautores en el delito de homicidio calificado con alevosía y uso indebido de arma orgánica.
El escrito fue presentado ante el Tribunal 1º de Control del estado Falcón, instancia a la que el Ministerio Público solicitó el pase a juicio de los cinco policías, quienes permanecen privados de libertad en la sede de su comando.
El día en que ocurrió la muerte del detective del Cicpc, los mencionados funcionarios policiales de Falcón formaban parte de una comisión que se conformó para una entrega vigilada por un caso de extorsión, en el que presuntamente estaba involucrada la víctima.
Durante el procedimiento, Castro Molina se percató de la presencia policial, por lo que se generó un intercambio de disparos en la avenida Pinto Salinas con calle Maracaibo en Coro, situación que aprovechó para huir del lugar, lo que provocó una persecución que finalizó a pocas cuadras de una sede del Instituto Nacional de Transporte Terrestre, donde fue alcanzado por los policías, quienes le habrían propinado tres disparos en la espalda.
Posteriormente, el funcionario de la policía científica fue trasladado a un centro asistencial, sitio al que llegó sin signos vitales.