El petroleo bajó el lunes sin poder resistir las inquietudes por la demanda mundial y mejoras en las perspectivas de producción en Canadá y África.
El barril de «light sweet crude» (WTI) para julio cedió 19 centavos a 48,88 dólares en Nueva York y acumuló su tercer cierre consecutivo a la baja.
En Londres el barril de Brent para agosto bajó también 19 centavos a 50,35 dólares.
Un factor de la baja fue probablemente que Libia pueda encontrar un nivel de estabilidad que permitiría al gobierno reconocido por la ONU retomar el control de las terminales de exportación de petróleo, según Mike Lynch, del grupo Strategic Energy and Economic Research.
Además apuntó que la producción canadiense se está normalizando tras los incendios forestales del mes pasado mientras que en Nigeria se negocia un acuerdo para frenar la rebelión que ha destrozado instalaciones petroleras.
«Toda reanudación de la producción en Libia y Nigeria demoraría aún más llegar al equilibrio de la oferta y demanda», subrayó Tim Evans, de Citi.
La producción total de la OPEP cayó 100.000 barriles por día el mes pasado. Nigeria produjo 250.000 barriles menos pero se compensó con el aumento de la producción en Irán y Kuwait, según Matt Smith, de ClipperData citando un informe de la OPEP.