Un lugar acogedor, lleno de arte y donde el tradicional quesillo es el consentido de la casa, abre sus puertas diariamente en la grandiosa Flor de Venezuela al este de la ciudad. La vista es ideal para contemplar, el ambiente agradable para conversar y el fondo musical propicio para enamorar, siempre en medio de variados postres y crepusculares arreboles
Influido por su crianza recordada con cariño por la elaboración de especiales quesillo hechos por su madre, Yorman Arias, fiel amante del estado Lara, decide enrumbarse hace cinco años en una nueva propuesta de dulcería especializada en este sabroso y tradicional postre, que acompaña muchos hogares y que forma parte de la identidad venezolana.
El lugar, que inició en Cabudare y que actualmente se encuentra también en Barquisimeto, lleva por nombre Quesillera Café y ofrece varias opciones en la presentación de este dulce, que además de ofrecerse de manera tradicional con leche condensada y un toque de ron, puede solicitarse con otros ingredientes como coco, canela, café, chocolate, almendra o cocuy, e incluso con algunos más particulares entre los que destacan: ají, aguacate o maíz, solos o combinados, que lejos de resultar incompatibles, son agradables al paladar gracias al proceso cuidadoso para trabajarlos.
Por otro lado, su carta está conformada, entre otras cosas, por torta de queso con topping de fresa, dulce de leche o chocolate, pay de limón o parchita, tiramisú, marquesas y tortas con galleta, almendra, coco y nuez; aunado al postre del día que comienza a pasearse entre tortas de piña, auyama, cambur y maíz. De igual forma, sirven café gourmet elaborado con granos molidos al momento, así como tés, batidos de frutas naturales y merengadas.
Entre obras de arte…
Uno de los atractivos del sitio, es la cantidad de obras que le dan vida, ofreciendo un concepto tipo galería donde se conjugan pinturas, ensambles y esculturas, que permiten a los visitantes contemplar y valorar el arte de una forma distinta. “En este sitio, le damos la oportunidad a los artesanos y artistas plásticos larenses de proyectar su talento, en algunas ocasiones desconocido o excluido, pero que sencillamente es extraordinario”, comenta Franyerson Reinozo, supervisor y gerente, agregando que al mismo tiempo, es una manera de reconocer lo nuestro y avivar el espíritu creativo del venezolano.
En este sentido, lámparas, servilleteros, adornos en vidrio y pinturas de Rafael Majano, Alfredo León, Nemesia Daza y Cristhian Ferreiro, son algunos de los trabajos expuestos en el lugar; donde además se apoya la ecología y el trabajo artístico con materiales de provecho.
Aunado a este concepto, la Quesillera cuenta con varios espacios para ofrecer una estadía placentera a sus clientes y amigos, entre ellos uno ideal para los pequeños de la casa, donde se puede pintar sobre un carrete enorme de colores dispuesto como mesa; otro para enamorados donde una puerta de madera con cadenas es perfecta para sellar el amor; y uno mucho más cómodo, adaptado a personas mayores o quienes prefieren la elegancia.
Si se decide visitar este espacio, el gran Don Quijote de la Mancha lo recibirá, reencarnado en una obra de hierro forjado grandísima, para invitarlo a disfrutar de un rato ameno y diferente, rodeado de la naturaleza y donde se sentirá como en casa, disfrutando de los quesillos de Yorman, tal y como los preparaba su mamá, sencillamente…¡con mucho cariño!
Información: @Laquesilleracafes