Un estudio publicado por investigadores de la Universidad de Yale encontró que las personas se sienten más inteligentes de lo que realmente son al utilizar el internet como herramienta para obtener información, creándose así una ilusión de poseer muchos conocimientos.
La escritora Emily Yoffe, investigadora de la Universidad Estatal de Washington explicó que “buscar” es uno de los impulsos fundamentales de todos los seres humanos. “Nuestra necesidad de buscar todo, desde comida a la información que nos despierta y nos lleva a través de cada día, es debido a que el acto de búsqueda es impulsado por la dopamina (una sustancia química asociada con el placer y la adicción), que fuertemente predispone a la persona para que busque el seguir disfrutando”.
Desde información acerca de estilos de vida saludables, rutinas de ejercicios, compra y venta de artículos hasta lo último en tendencias musicales y series y películas, se pueden encontrar o ser objetivo de investigación en el internet.
Las redes sociales forman parte de este conglomerado al crear “comunidades virtuales”, concentrando en plataformas de internet grupos de personas que se relacionan entre sí y comparten información e intereses comunes.
El blogger venezolano Iván Flores informó que el principal objetivo de las redes sociales es entablar contactos entre las personas, ya sea para reencontrarse con antiguos vínculos o crear nuevas amistades. “Pertenecer a una red social, le permite al usuario construir un grupo de contactos, que puede exhibir como su “lista de amigos”. Estos amigos pueden ser amigos personales que él conoce, o amigos de amigos. A veces, también, son contactos que se conocieron por internet”.
El psicólogo Eduard Guerrero indicó que las redes sociales son nodos de interacción que no solamente conecta a una persona con otra, sino también sirve como interacción de organización, empresas y microempresas.
Existen dos tipos de redes sociales, están las horizontales o globales como Facebook, las cuales están asociadas directamente a toda una gama de información que se puede compartir sin ningún margen de población específico o límite.
Y las redes verticales que están específicamente relacionadas con el ámbito profesional. Todas los seres humanos que están incluidos dentro de esa red social tienen que cumplir con un parámetro o categoría, en la mayoría solo se comparten opiniones, presentaciones, currículos, proyectos, entre otros.
“Con el uso de las redes sociales se van desarrollando tendencias desde el punto de vista social y psicológico, puesto que cada una de las interacciones que se producen dentro de dichas aplicaciones incurre en el autoconcepto personal”, expresó Guerrero.
Explicó que la foto de perfil colocada en estas redes, habla de cómo se visualiza la persona y como desea que los demás la vean. “Siempre el usuario va a subir la imagen que mejor lo describa, convirtiéndose en reiteradas ocasiones en un disfraz donde oculta su concepto real”.
Por otro lado, buscar los Me gusta, al momento de compartir información, pertenece a un mecanismo de modelación social en donde el cibernauta desea aumentar de proporción su publicación. “En este caso cuando un individuo al compartir algún tipo de imagen o información y comienza a recibir Me gustas, se sentirá motivado a seguir compartiendo información parecida para continuar obteniendo la aceptación”.
La mayoría de los usuarios jóvenes de Facebook están en constante búsqueda de aceptación social. Las primeras redes que se crearon estos usuarios en gran mayoría fueron para seguir e incursionar dentro de esta moda que suplantó en alguna manera el correo electrónico, el cual actualmente solo se utiliza para documentos de índole profesional o laboral.
Dentro de esta búsqueda de aceptación o de modelamiento social también se produce un cambio en los gustos, tendencias e incluso personalidad. Los seres humanos son seres biopsicosocial que necesitan interacción para poder entrar en conjunto y satisfacer el sentimiento de autorrealización propia.
“Existen muchas personas que actualmente le gustan algunas series de televisión, películas, libros o hasta ideologías personales por el hecho de ser algo de tendencia, novedoso, que se comparte a diario. Los gustos van asociados y pueden ser manipulados por lo que se observa en las redes sociales, todo en la búsqueda de la aceptación social”.
Dentro de la Universidad Yacambú existen varios estudios que hablan sobre el nivel de dependencia en las redes sociales, las cuales están asociadas a un trastorno obsesivo o de adicción, en el cual la persona no puede sobrevivir o tiene la idea falsa de no poder subsistir sin el uso de las redes sociales, creándose un Trastorno de Dependencia Emocional hacia las redes.
El licenciado hizo hincapié en que muchas personas dejan de realizar actividades cotidianas o necesarias para poder tener más tiempo de indagar o interactuar dentro de las mismas.
El auge de estas nuevas tecnologías podrían originar en un futuro consecuencias positivas con el desplazamiento y ahorro de costos, pero podría verse considerablemente afectada la persona que mal utilice estas redes presentándose episodios de baja autoestima, falta de atención, poca interacción social real y disminución en el proyecto de autorrealización.
Ciencia para el cambio
El conductor del programa radial Ciencia para el Cambio, de la emisora La Voz de Guayana 89.7, doctor Héctor Fernández, explicó que el desarrollo de la sociedad se ha modificado con el incremento del uso de las redes sociales y los teléfonos celulares al haberse alterado las zonas activas del cerebro.
“Antes la gente recurría a la memorización, esta tarea se ha visto simplificada con el uso de los teléfonos inteligentes”.
El cerebro actúa igual que los músculos, si no se activa o ejercita pierde sus capacidades, modificándose incluso la morfología del mismo. “El hecho de que las personas ya utilizan menos su capacidad para memorizar, puede verse afectada la disposición para pensar y analizar. Alguien que no ejercita su memoria es más propensa a ser manipulado y de esta manera se ha demostrado cómo las redes y el mal uso de ellas ha cambiado el comportamiento de los más jóvenes”.
La edad en la cual los usuarios se ven más influenciados o manipulados por el uso de las redes sociales es entre los 14 hasta los 27 años de edad. “La mayoría de los jóvenes utilizan las redes como un hábito. Es un elemento que ocupa a las personas en sucesos no importantes ni relevantes”.
Los seres humanos para estar cómodos deben sentirse aceptados por un grupo, este grupo en la actualidad viene siendo virtual y cada usuario sigue las tendencias pautadas por ese grupo de amigos y seguidores con los que normalmente se relaciona durante horas en un solo día.
Desde hace cinco años en Venezuela el fenómeno se ha expandido gradualmente. “Es increíble cómo la sociedad ha cambiado tanto que actualmente la misma depende del uso del internet para hacer amistades, trabajar e incluso conseguir pareja”.
El mal manejo de los dispositivos se deja influenciar por la presión social y podría afectar los esquemas mentales de las generaciones futuras si no se enseña el uso adecuado de las nuevas tecnologías.
Se deberían crear campañas, cursos e incluir en los colegios programas regulares que obliguen a los maestros a formarse ellos mismo y que eduquen a los niños y jóvenes en el manejo de los nuevos dispositivos, dijo el abogado.
“El problema no es utilizarlo, porque se debe aprovechar las nuevas tecnologías, el problema es cómo se usa. Si una persona se hace dependiente se crea enfermedades asociadas a ellas, debemos educarnos por el bien personal de nuestras familias y las nuevas generaciones que están por nacer”.
No solamente con el acceso de estas nuevas tecnologías se han creado profesiones y amistades, las relaciones a distancias conforman parte del panorama en una época tan globalizada.
Un informe de Pew Internet demostró que la conectividad móvil y las redes sociales afectan tanto la integración de las parejas ya establecidas e incide en formación de nuevas. El 74% de los internautas adultos admite que internet ha tenido un efecto positivo en su relación sentimental, mientras que 20% confiesa que ha sido afectado negativamente.
Los sistemas como Skype permiten a las parejas separadas por distancia poder relacionarse, sentir tonos de voz, regalando ese sentimiento de pertenencia hacia la pareja extrañada. Sin embargo, es frecuente, encontrar relaciones ficticias donde la persona no se muestra tal cual es, dando una imagen engañosa, omitiendo sus defectos o exagerando sus virtudes.
A su vez en un país en donde cada año aumenta el incremento de inmigración, las redes sociales y los nuevos sistemas permiten conectar y unir aquellos lazos familiares separados por la distancia.
Community Manager
Existe una profesión que se ha arraigado en el ámbito laboral a raíz del incremento en el uso de las redes sociales, llamada Community Manager.
Un Community Manager está encargado de gestionar una comunidad en internet, específicamente en las diferentes redes sociales que existen actualmente.
La licenciada Belkis Araque, fundadora del la agencia digital Barquisimeto Móvil, explicó que desde el inicio de internet la gente se abocó a participar en foros con comunidades y cuando no existían las redes sociales utilizaban plataformas de conversación. “Lo importante es entender que lo digital es una rama o una extensión de la vida real, desde que internet existe siempre ha habido la organización de foros para la discusión y conversaciones de temas en comunes”.
Existen muchos casos en donde el Community Manager asume distintos roles, siendo quien busca el contenido, lo pública y lo programa; sin embargo, su función principal es la gestionar y conversar con su comunidad para ser los oídos de la empresa dentro del rango digital como tal. “En Venezuela se estima que el Community Manager adquiera diversas funciones dentro de su rol, pero la idea es que sea un trabajo integrado donde pueden obtener los mejores resultados posibles”.
El perfil y estudios que debería tener un Community Manager va más allá del don de comunicación, integra a su vez un nativo de los entornos digitales y que tenga proactividad y sentido común. Desde un contador hasta un ingeniero sin estar relacionado directamente a la comunicación o publicidad puede ejercer correctamente el rol.
“Como el internet es accesible dentro de las conexiones y es algo económico, las personas creen que es una profesión que evidentemente no necesita preparación por pensar que cualquiera puede manejar una red social, existen muchos profesionales en el campo que no poseen la preparación indicada, ha existido un mayor auge en el incremento de estos profesionales desde hace dos años en adelante”.
La licenciada dice que uno de los escenarios principales que ha dado un impulso al uso de los Community Manager dentro de las empresas sea el tema país. “Desde hace dos años para acá no es un secreto que estamos viviendo un situación económica muy fuerte, llevando a las personas a buscar otras alternativas, lo cual no es malo; pero requiere de que la gente pueda prepararse y estudiar, muchos lo pintan como voy a matar tigritos siendo Community Manager, pero va más allá de eso, es un profesión que exige especialización”.
Actualmente, existen muchos casos de empresas que comprenden la importancia de realizar en el entorno digital los procesos que puede efectuar un Community Manager.
Araque explica que es de suma importancia hablar sobre los influenciadores. Muchas personas piensan que ser influenciar es tener cuentas con más de 500 mil seguidores; sin embargo, un influenciador es una persona que puede modificar una conducta, ya sea de compra, liderazgo o acción social. Si una persona con menos cantidad de seguidores puede ser un líder para modificar conductas se convierte en un influenciador.
“Hay una nueva generación que no se comporta igual que las generaciones pasadas, por ejemplo los que tienen más de 40 años y están acostumbrados a los medios tradicionales, todavía compran periódicos, ven noticias; en cambio estos nativos digitales nacieron con el internet a la mano, con los canales de Youtube, y se comportan distinto; es tema generacional, estos chicos no se mueven igual que antes porque nacen con medios sociales debajo del brazo. Razón por la cual hoy día es más importante incentivar el buen uso de la redes sociales”.
Selfie de muerte
Según el portal de BBC Mundo en la búsqueda de una foto llamativa, ocurrieron 49 accidentes fatales en los últimos dos años a lo largo del mundo, quienes veían que mientras más peligrosa fuese la situación más populares iban a ser si arriesgan su vida por una foto.
En febrero de este año tres estudiantes de medicina indios se ahogaron luego de caerse en un canal de irrigación mientras se tomaban una foto en la orilla. En marzo un hombre de 43 años se disparó frente a su novia al tomarse un selfie en Washington, Estados Unidos.
Según Priceonomics, las caídas son los accidentes más frecuentes en esta moda, siguiendo los ahogados, los arrollados por trenes y los que se disparan sin querer. Ante esto el Gobierno ruso publicó una guía donde explica “cómo no morir” mientras se toma una foto.
La moda de los selfies se volvió parte de la cultura popular luego de que Instagram usó el término por primera vez en 2011. La palabra es mencionada semanalmente 365.000 a la semana por Facebook y 150.000 en Twitter.