El Mercado Mayorista de Barquisimeto funcionó este miércoles como una bodega. En vez de camiones cargados con mercancía, se veía a las personas con una harina de maíz en cada mano.
Los propietarios del comercio 8B-3 Pulpa de Frutas, ubicado en el área de galpones verdes frente a La Playa, fueron obligados a vender 200 bultos de harina a los clientes que, cual supermercado, se enfilaron desde la madrugada para adquirir el producto.
Yamileth Lucena vive en Barrio Unión, se enteró que el martes hubo ventas al detal de arroz y harina en un comercio de Mercabar y pensó que ayer pasaría lo mismo, no estaba equivocada. Se fue temprano y a las 10:00 de la mañana finalmente compró un combo de dos harinas y una pulpa de frutas.
Algo nunca visto en el mercado, ideado exclusivamente para ventas al por mayor.
Benito Rocha, presidente de Mercabar, señaló que el hecho se debió porque clientes denunciaron que en ese establecimiento el bulto de harina de maíz era vendido en 22 mil bolívares.
Dijo que efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana debieron organizar a los clientes y vender la harina de manera controlada, para evitar episodios de violencia. Pero resaltó que esto no volverá a suceder, porque “Mercabar no es una bodega, solo debe despachar a clientes con registro de comercio y cada venta debe tener una guía que especifique el destino, no se le puede vender a minoritarios”.
Aseguró que a partir de hoy Mercabar implementará un operativo para impedir el acceso al mercado a personas que tengan la intención de comprar al detal.
Rocha dijo tener información que nueve comerciantes de Mercabar están incurriendo en delito de especulación, pero esperan contar con las denuncias formales y pruebas antes de actuar.
La operatividad e ingresos en el mercado se ha visto afectada en los últimos días. Los comerciantes tienen miedo de abrir sus negocios por temor a ser saqueados.
En el área de galpones verde hay 20 establecimientos, ayer todos estaban cerrados a excepción de Pulpa de Frutas, donde se hacía la venta detallada.
El mercado fue cerrado por varias horas hasta culminar con la venta de la harina. Alrededor de 2 mil personas compraron el combo que costaba 800 bolívares.
Comerciantes asustados
“Se armó la guerra”, decían los vendedores de verduras y hortalizas del área de La Playa, que veían frente a ellos a más de un centenar de uniformados con equipo antimotín.
La presencia de tantos policías no es cotidiana, en el Mayorista hay un alto índice de asaltos y hurtos diarios y los comerciantes siempre han solicitado mayor resguardo, pero ayer les inquietaba ver tal movimiento policial.
“Ojalá no se formen bochinches todos los días, es incómodo trabajar así, si el mercado se convierte en un abasto nos va a generar muchas pérdidas” señaló un vendedor de frutas.