La familia de EL IMPULSO disfrutó de una tarde diferente dedicada a la relajación y al encuentro con la vida, durante una actividad realizada ayer miércoles en la sede del diario.
Florelena Pérez, formadora de facilitadores de biodanza, ofreció una muestra de este mecanismo que tiene como finalidad “conectarse con el yo interno”.
La biodanza es una metodología creada por el psicólogo y antropólogo Rolando Toro Araneda. Consiste en una serie de ejercicios que se realizan al ritmo de la música para rescatar en las personas la alegría de vivir.
Pérez informó: “El objetivo fundamental de este modelo teórico es fortalecer la identidad, llevarnos a la integración”.
Por su parte, Toro establece que el ser humano posee una serie de potenciales genéticos que son inhibidos durante el desarrollo de la vida como consecuencia del medio ambiente donde crecen las personas, también influye la educación, las situaciones, la familia, entre otros elementos que representan un obstáculo para el descubrimiento interno.
Pérez añade: “La biodanza propone que a través de la música y el movimiento se recupere la conexión consigo mismo para que se estimulen los potenciales genéticos”.
Según el creador de este método los potenciales se clasifican en cinco vivencias: vitalidad, se refiere a tomar un reposo de las actividades diarias para respirar y meditar; creatividad, corresponde a que las personas deben hacer de su vida una obra de arte; la sexualidad, es revivir la pasión por la existencia; afectividad, es la conexión con la totalidad; y por último trascendencia, sobre avanzar a niveles superiores en la escala evolutiva.
Los trabajadores que hacen vida laboral en el diario se encontraron durante una hora en la que bailaron, rieron y hasta lloraron.
Los participantes de la actividad pudieron relajarse con cada uno de los ejercicios que les permitieron demostrar afectos a sus compañeros de trabajo mediante miradas y abrazos.
Eyilde Rosales, coordinadora de Seguridad y Salud Laboral del diario expresó: “Esta experiencia fue muy útil para todos, nos permitió conectarnos con nosotros mismos y por supuesto con nuestro equipo”.
Durante la actividad Pérez informó a los participantes que la vida es un cambio constante y que el organismo sufre consecuencias cuando se presenta resistencia a ello.
Florelena Pérez es egresada de la Fundación Internacional de Biodanza de Chile, actualmente es formadora de facilitadores de esta cátedra, se encarga de educar a los interesados durante un curso de tres años. Su escuela está ubicada en El Manzano.