Según un análisis especial realizado por la empresa Hinterlaces, especialista en estudios de opinión, la Asamblea Nacional es la única institución que incrementa su popularidad y prestigio ante los venezolanos, mientras el resto de los poderes públicos desgastan vertiginosamente su simpatía, destacando el Tribunal Supremo de Justicia como agente de confrontación con el legislativo, comportamiento que lo hace desvirtuarse en la opinión pública nacional.
La AN es la única rama del poder público nacional que se ubica en el tope de las preferencias de los venezolanos, superada solamente por instituciones del sector privado, como lo son Empresas Polar y los medios de comunicación social.
De hecho, la gente piensa que la oposición al gobierno nacional cuenta con el respaldo de la mayoría del país. El 60, 8 por ciento de la gente en el país tiene una opinión favorable del parlamento elegido de manera libre y democrática el pasado 6 de diciembre y que arrojó una abrumadora mayoría de la Mesa de Unidad Democrática (MUD).
La Alta Jerarquía de Iglesia Católica también es muy bien vista por los venezolanos, contando con el 62,3 por ciento de aprobación.
Esto contrasta con los resultados obtenidos por el TSJ, el PSUV, PDVSA, la Defensoría del Pueblo y la Fiscalía, todos muy por debajo del 40 por ciento de opinión favorable del país.
La Fuerza Armada Nacional tiene una opinión “desfavorable” de más del 58 por ciento de la población, mientras que el TSJ sobrepasa el 65 por ciento de opinión en contra, como lo arroja este estudio, porcentaje superado por el partido de gobierno (PSUV). Mientras que los partidos políticos de oposición cuentan con una opinión favorable de 53,1 por ciento de los ciudadanos.
El gobierno nacional encabezado por Nicolás Maduro y su equipo de ministros tienen sobre sí, arroja el estudio de opinión, la responsabilidad de la actual situación del país, agobiante en lo económico, marcado por la escasez de productos de primera necesidad, una desenfrenada inflación y la falta de inversión en el sector productivo. Sólo el 25 por ciento de la población cree en la tesis de la “guerra económica”, de hecho se reconoce que es desde el Ejecutivo y no desde el legislativo, que se deben y pueden tomarse medias que corrijan el actual desastre económico.
La gestión de Maduro ha venido decreciendo desde el año 2014, aunque es notorio su desgaste que lo lleva a ubicarse muy por debajo del 15 por ciento de popularidad. “Según las mediciones de abril de 2016, hoy día existe una diferencia abrupta cercana a los veinte puntos porcentuales, siendo que el 70,38% de los encuestados calificó negativamente el desempeño de Nicolás Maduro -entre «muy malo» (37,10%), «malo» (17,18%) y «regular a malo»- y un 29,43% lo valoró positivamente –«muy bueno» (3,54%), bueno» (3,54%) y «regular a bueno» (14,43%)”, se lee en el reporte de Hinterlaces, donde también se evidencia que más de la mitad de la población (64,18%) ve la salida del poder de Maduro como vía para la solución de la crisis.
Vale la pena mencionar que Empresas Polar cuenta con un 78,3 por ciento de opinión favorable entre los venezolanos, a pesar de los reiterados e inclementes ataques políticos y económicos en su contra. Los empresarios tienen la simpatía de más de la mitad de los ciudadanos.