El trabajo coordinado entre las Fuerzas de Acciones Especiales de la Policía Nacional Bolivariana, el Sebin y la Dirección General de Contrainteligencia Militar logró la ubicación de uno de los sujetos más buscados del país, Oswaldo Oropesa, alias Lucifer.
Se encontraba en el hotel Colonial en kilómetro 9 de la carretera Panamericana de los Altos Mirandinos cuando fue sorprendido por los efectivos de seguridad, con los que decidió enfrentarse y cayó abatido.
La información fue confirmada por el Ministro de Interior, Justicia y paz; Gustavo González López, a través de la red social Twitter en la que especificó que el delincuente tenía un amplio prontuario por delitos de homicidio, extorsión, secuestro, distribución de drogas, tráfico de armas.
De Lucifer se decía que fue quien decretó el toque de queda en El Cementerio, Cota 905 y las zonas aledañas para impedir que patrullas policiales se desplazaran.
Van cuatro
Con la muerte de Lucifer se suman cuatro los delincuentes ultimados por los cuerpos de seguridad en este año y que engrosaba la lista de los más buscados en el país por dirigir peligrosas bandas dedicadas a asesinatos, tráfico de armas, secuestro, extorsión, robo de vehículos y narcotráfico.
El primer abatido fue Gabriel Argenis Sánchez Palma, alias “El Gabrielito” (24), durante un operativo en Marizapa, Caucagua, estado Miranda, realizado el pasado 5 de abril. Algunos de los delitos por los que era buscado está el asesinato del general (R) de división de la GNB, Jorge González Arreaza, y su esposa, registrado el 2 de abril.
Después cayó José Antonio Tovar Colina, alias “El Picure”, el 3 de mayo en un corral de gallinas ubicado en El Sombrero, estado Guárico. También operaba en Aragua y Miranda.
A los pocos días fue ultimado Jamilton Andrés Ulloa Suárez, alias “El Topo”, jefe de la banda a la que atribuyen la muerte de 17 mineros en Tumeremo. Era quien controlaba las mafias de la extracción ilegal minera en el estado Bolívar.
Aún falta por dar con el paradero de “El coqui” dedicado a la distribución de drogas y robo de vehículos; tiene como zona de control la Cota 905. También están tras la pista de “El juvenal” líder de una banda dedicada a la extorsión.