Las familias de numerosas comunidades de la parroquia El Cují y en los límites de los municipios Iribarren y Crespo continúan padeciendo por las irregularidades en el suministro de gas doméstico. Por segundo día seguido los habitantes de Sabana Grande, Las Casitas, Don David y otros sectores cercanos salieron a protestar cerrando con las bombonas vacías el tránsito automotor por la avenida intercomunal El Cují-Tamaca.
Y como el día anterior, se quejaron de que desde hacía unos dos meses no recibían el producto tan necesario en todo hogar para la elaboración de los alimentos.
“Aquí estamos otra vez, y estaremos mientras el gobierno no nos resuelva nuestro problema, porque ya estamos cansados de tantas mentiras por parte de esa gente que distribuye el gas”, manifestó Andreina Meléndez, una de las manifestantes.
Otros reiteraron lo dicho el día anterior de que parte de los cilindros que les envían son desviados a otros lugares diferentes al sitio destinado en El Cují para la distribución, con el fin de venderlos a precios superiores a los reglamentarios.
“Hasta en mil quinientos bolívares nos venden las bombona pequeña que vale solamente cinco, y eso hay que investigarlo para acabar con esa vagabundería”, dijo por su parte Samuel Contreras, otro vecino.
La vía se mantuvo cerrada hasta que llegó un camión con cierta cantidad de bombonas, aunque insuficientes para todos.
Y en El Paso de Tacarigua, límites con el municipio Crespo, mujeres y hombres amanecieron protestando por tercer día consecutivo por la misma razón: la falta de gas doméstico.
Afortunadamente este jueves sí fueron atendidos y muy temprano llegó un camión con el combustible casero y el cierre de la vía sólo se mantuvo por algunos minutos, normalizándose el tránsito cerca de las ocho de la mañana.
