Cuatro meses han transcurrido desde que el presidente de la república, Nicolás Maduro, junto con su tren ejecutivo, anunció que con motivo de la Emergencia Económica se activarían un conjunto de motores, que oficialmente representaron quince áreas productivas del país.
Tanto públicos como privados conformarían estas mesas de trabajo, enmarcadas en el Consejo Federal de Economía Productiva, y aunque televisivamente se ha apreciado la participación de representantes de múltiples sectores en la formulación de propuestas, gremios especializados en cada área sostienen que el llamado incluyó sólo a unos pocos, por lo cual no todos han tenido la oportunidad de aportar con ideas a la actual crisis del país.
Algunos de los que sí fueron llamados, plantean que no todas sus propuestas han sido escuchadas y aunque continuamente se aprecian anuncios, decretos y cifras de los 15 motores económicos, especialistas en estas materias sostienen que lo ejecutado por el gobierno no termina por atender las necesidades reales de cada sector.
Mientras algunos se refieren a los efectos del modelo económico venezolano y sus múltiples controles, otros postulan como principal problemática la falta de condiciones y disposición para el desarrollo económico del país.
Cada sector dice estar dispuesto a sumarse a este trabajo y aportar con sus trabajos y propuestas. Sin embargo, piden al gobierno comprender el origen de la crisis.
Agroindustria incomprendida
Aquiles Hopkins, vicepresidente de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios (Fedeagro), lamenta que las propuestas de solución a las actuales problemáticas del sector, planteadas por ellos, no se hayan tomados en cuenta.
Puntualizó que la atención ha sido “mínima” y recordó que no se importó la semilla de papa para el país, situación que se le suma la aguda escasez de semilla de hortalizas.
Tampoco ha ingresado semilla de pasto para atención de la ganadería y el 70% de los productos médico-veterinarios no se encuentran en el mercado. Esto se repite en todos los rubros y actividades.
Calificó el diálogo de los motores como “estéril”. No obstante, mantienen su llamado al respeto de la propiedad privada y garantías de seguridad personal.
Sobre algunas de las medidas tomadas por el gobierno, como el pago de la deuda por subsidio, refirió que “no es un logro, sino una obligación que habían contraído y que por inflación representa pérdidas”.
Respecto al Plan de Agricultura Urbana, manifestó que este sería un “complemento interesante a la producción nacional, pero no la solución”.
Exportación a la expectativa
Ramón Goyo, presidente de Asociación Venezolana de Exportadores (Avex) señaló que con base en los primeros anuncios gubernamentales, se han generado expectativas favorables en el sector. No obstante, no todos los anuncios se terminan de ejecutar.
Citó que la ampliación de la línea de créditos en dólares para el sector exportación en Bancoex, no se ha materializado. Igualmente, destacó que en el proceso de simplificación de procedimientos, la Ventana Única de Exportación, que se ha anunciado en distintas oportunidades, no ha sido implementada, aunque el diseño fue elaborado y reduciría el tiempo en trámites y discrecionalidad de funcionarios.
A esto adicionó que se eliminaron un conjunto de procedimiento como el Registro de Exportadores en Aduanas. Sin embargo, este aún se solicita.
Sobre la zona estéril en aduana, señaló que el sistema sólo ha sido implementado en Puerto Cabello y que no se emplea en su totalidad, sino a discrecionalidad de los funcionarios.
Acotó que es complejo impulsar la exportación, si no hay materias primas suficientes para producir.
Industria sin materias primas
Giorgio Reni, presidente de la Cámara de Industriales de Lara, manifestó que este motor no ha funcionado como se esperaba. Precisó que el sector aún no recibe dólares para importación de materias primas, maquinarias y repuestos, por lo que aún no se reactiva el aparato productivo.
Considera que desde un principio debió haber ocurrido un encuentro entre Gobierno nacional y empresarios, además de los gremios empresariales que hacen vida activa desde hace muchos años en Venezuela y “no sólo con los grupos afectos al gobierno o empresas de maletín interesadas en contactar con el gobierno”.
Sobre los anuncios realizados por entes gubernamentales en la materia, expresó que si bien algunos de estos puede gozar de sentido común, mientras se trate de acciones parciales, no habrá una verdadera solución para toda la problemática. “Con estos motores y dictámenes sólo se le dan medicinas a problemas específicos, pero no para la causa básica que aqueja a Venezuela”. Recordó que la problemática se presenta en la adquisición de materias primas nacionales e importada por igual.
Farmacia espera pagos
Freddy Ceballos, presidente de la Federación Farmacéutica Venezolana (Fefarven), manifestó que para incrementar la producción nacional, deben poner a funcionar los 115 laboratorios del país y no a uno.
Apuntó que la federación en reiteradas ocasiones ha planteado al Ejecutivo reunirse con la industria para establecer convenios de pago, a partir de las posibilidades reales del país. “Pero si liquidan una vez y no hay un pago continuo, no funcionan”.
Lamentó que en el motor farmacia no se haga mención de este punto y que “sólo busquen un efecto mediático”. Asimismo, precisó que al activar convenio con Cuba por $1.428 millones, dejan de pagar la deuda a la industria por menos de $700 millones.
Sobre el compromiso de revisión de los precios de medicamentos, recordó que están regulados desde 2003 y desde entonces el sector registra pérdidas.
Acotó que si se mantiene este control debe haber revisión continua, además de esquemas que no “asfixien” a farmacias, disponiendo para ellas entre 18% y 21% de ganancia, con lo que deben cubrir gastos operativos por el orden del 16%.
Turismo sin condiciones
José Yapur, presidente del Consejo Superior de Turismo, apuntó que el planteamiento del motor turismo, se hace en un momento donde existen una serie de deficiencias en servicios públicos, que afectan la prestación del servicio turístico.
-En turismo los productos están en Venezuela y se construyen en Venezuela… Sin embargo, simultáneamente con el anuncio se agudiza la crisis en servicios de agua y la electricidad.
Explicó que esto se transforma en un daño a la imagen.
A esto sumó que si bien se desarrollaron mesas de trabajo con el sector, las propuestas formuladas por los empresarios no fueron tomadas en cuenta.
El Consejo Superior de Turismo plantea hacer que Venezuela desarrolle una serie de condiciones para el progreso de la actividad, más que trabajar en la creación de proyectos con características turísticas.
Subrayó que la mejora de las condiciones pasa por: solucionar situación con líneas aéreas comerciales, revisar situación de puertos y aeropuertos, así como la vialidad, atender el tema seguridad y los programas de capacitación profesional, entre otros temas.
Banca no está lista
Orlando Zamora, exjefe de la división de riesgos cambiario del Banco Central de Venezuela (BCV), manifestó que para el motor Banca Pública no ha habido anuncios oficiales y últimas medidas indicarían que habrá más controles y mayor racionamiento de la actividad económica.
-Brindan líneas de crédito específicas, pero no todos los bancos públicos están preparados… sumado a que el esquema general Estado de Excepción permite mayor injerencia pública y capacidad para tomar medidas en otras áreas.
Manifestó que en el área bancaria se plantea entonces que el Estado controle ingresos y egresos en las finanzas. “Se teme entonces que el destino de la carteras de los bancos, sea reorientado con mayor presencia del sector público”.
Zamora indicó que en términos generales, ninguno de los planteamientos al respecto, podrían ser materializados. “Hasta ahora sólo han tratado de crear un sistema de plataforma única, que permita que las agencias bancarias actué en una misma orientación y dichos avances han sido lentos”.
Construcción espera acciones
Frank Mendoza, presidente de la Cámara de Construcción en Lara, refirió que aprecian como positiva la intención del gobierno de impulsar las actividades del sector. No obstante, dichos propósitos se han quedado sólo en anuncios.
-Han ofrecido una cantidad de dinero importante, pero no se ve que eso surja efectos en las constructoras.
Manifestó que existe una clara necesidad de revitalizar el sector y el gobierno lo conoce, puesto que el presidente Nicolás Maduro, por ejemplo, se ha referido a inversiones de hasta Bs. 240 mil millones, sin embargo, se desconoce el destino y uso del dinero.
Tampoco se aprecian acciones concretas en la recuperación de los servicios, primordiales para el sector construcción, y para lo cual se deben realizar importantes inversiones. Mencionó que tampoco se aprecia una pronta problemática a la crisis eléctrica.
A esto sumó que persiste la escasez de materiales de construcción, en especial cabillas y cemento. Agregó que por la poca oferta, se genera un mercado especulativo en el que incluso se ven una cabilla de 1 pulgada y 12 metros en Bs. 24 mil.
La minería es un embuste
El Gobierno de Maduro ha venido hablando del encendido del motor del Arco Minero, pero todo esto no es más que un monumental engaño. Todos estos proyectos que se han anunciado para reactivar la economía y que figuran como elementos de la denominada Emergencia Económica, no son más que puros engaños, ya que hasta el momento no han sido probadas las reservas de ningún mineral y mucho menos cuando no se han hecho previamente los estudios, declaró el diputado Andrés Velásquez, de la Asamblea Nacional, quien es conocedor de la zona porque fue gobernador de Bolívar.
Pudiera existir un potencial de reservas mineras importantes, pero hasta el momento eso no puede ser probado. No se puede contabilizar como pretende el Gobierno como reservas probadas de algún mineral. Lo que sucede es que este régimen pretende firmar convenios con empresas explotadoras con el propósito de que éstas traigan dólares, pero lo que se está firmando es la entrega de la soberanía de la República. Es por ello que el país debe estar muy alerta a estos anuncios que de concretarse van a perjudicar gravemente a la nación.
Caída petrolera
El motor de la industria petrolera está fundido, como los demás motores que ha pretendido hacer ver que existe el Gobierno Nacional, declaró el Dr. José Toro Hardy, exmiembro del directorio de PDVSA. Primero: lo que estamos experimentando es una importante caída de la producción petrolera de Venezuela.
Las cifras que obtenemos a través de la OPEP o la Agencia Internacional de Energía, nos indica que Venezuela está por debajo de los 3 millones y medio de barriles diarios. En segundo lugar, PDVSA está irracionalmente endeudada. Las deudas financieras de esa empresa están por el orden de los 46 mil millones de dólares.
Los créditos comerciales ascienden a 16 mil millones de dólares. Además, las deudas por nacionalizaciones no son canceladas, que es otro tanto. Al sumar los distintos pasivos, superan los activos, que es de 86 mil millones de dólares. De manera, que básicamente ese motor es inservible. Y no hay posibilidad alguno de activarlo porque no hay dólares para hacerlo.
Disminuida industria petroquímica
La industria petroquímica en Venezuela ha disminuido sustancialmente, manifestó también el Dr Toro Hardy.
Esto se debe a que la materia prima fundamental para esa actividad es el gas natural. Y el desarrollo de este recurso natural ha sido frenado ostensiblemente.
El más importante de todos los proyectos, que era Cristóbal Colón, al norte de las penínsulas de Paria y Araya, donde había enormes reservas de gas natural, fue paralizado.
Se transformó después en uno mucho más pequeño que es el Mariscal Sucre, del cual todavía no ha salido ni un solo pie cúbico de gas natural comercial, no asociado.
El gas asociado que tenemos en el país depende fundamentalmente como su nombre lo indica de la producción petrolera.
Puesto que la producción petrolera ha venido cayendo, pues, lo mismo ha venido ocurriendo con la producción de gas natural asociado, particularmente, en la cuenca occidental de Venezuela, en el lago de Maracaibo.
Los militares no saben gerenciar industrias
Los militares no están formados ni capacitados para gerenciar empresas, sino para la seguridad de la República y para tal finalidad han sido preparados. Es por ello que resultó extraño que el Ejecutivo Nacional, mediante decreto publicado en Gaceta Oficial, haya creado la Compañía Anónima Militar de Industrias Mineras, Petrolíferas y de Gas (Camimpeg) para realizar actividades en esas ramas, sostiene el Dr. José Machillanda, coronel retirado del Ejército y profesor universitario .
Pero, además, indicó, han sido creadas alrededor de catorce empresas. La Fuerza Armada Nacional no se caracteriza con tener recursos para invertir, en razón de lo cual esas empresas suenan más como un diseño estratégico de mantener cuotas de poder a través de mecanismos que atraigan la voluntad ganada de esa manera de los militares y no por su conciencia institucionalista.
Reiteró que Hugo Chávez y luego Nicolás Maduro han venido desvirtuando las funciones institucionales de la Fuerza Armada para integrarla a la administración pública.
No habrá madera
El Motor Forestal que ha sido anunciado por Nicolás Maduro, dentro de las medidas tomadas para enfrentar la llamada Emergencia Económica debido a la caída del precio del petróleo, pero que se debe al fracaso del modelo económico establecido por Chávez y continuado por él, no deja de ser un engaño más de este gobierno mentiroso que nos llevado a la peor crisis sufrida por los venezolanos en la historia al punto de tener la inflación más alta del universo después de haber sido saqueado el tesoro nacional cuando obtuvo los mayores ingresos por concepto de la venta del crudo.
La opinión fue emitida por el diputado Filiberto Peña Canelón, del Consejo Legislativo y con experiencia en la banca internacional con proyectos agroindustriales, quien se refirió al fracaso del proyecto de Uverito, para producir madera en Monagas. No puede funcionar ese motor porque lo fundamental es el financiamiento y éste depende de los dólares.
Lo que sucede es que el gobierno, iluso y torpe, está exponiendo las ideas con la esperanza de que los inversores coloquen los recursos económicos. Pero, una actividad como la propuesta, para producir papel, requiere además de dinero, de tecnología, ninguna de cuales existe en el país.
Rezagados en las telecomunicaciones
En el área de las telecomunicaciones el Gobierno amplió su dominio en el área y limitó la presencia de empresas extranjeras, pero quedó rezagada por falta de inversiones, manifestó Orlando Zamora, ex funcionario del Banco Central de Venezuela y analista financiero.
Esas empresas de telecomunicaciones tienen una gran desventaja, porque la empresa pública es la que ha recibido los recursos para algunos planes; pero, la inversión para ampliar la capacidad de las líneas internas ha sido reducida.
Continuamos con el atraso de no darle entrada a las líneas ópticas que son las que multiplican la capacidad de comunicación en esas autopistas de comunicación. Y eso se ha disminuido porque la CANTV no ha ajustado las tarifas como debiera haberlo hecho, ya que no tiene los recursos para modernizar el sistema y hay un enorme rezago en las comunicaciones. Si alguien se comunica con Argentina, donde la velocidad es 10
a 1 comparada con la venezolana.
La colocación de esas líneas es costosa.
Aquí están muy golpeadas las comunicaciones porque las tarifas no están ajustadas a la realidad.
No se parcializa la economía
No se puede parcelar la economía, como pretende el Gobierno con esos Motores que funcionarán activando lo que ha denominado el Consejo de Economía Productiva, declaró el economista y abogado Edgar Urbáez. Esos motores son pretensiones ilusas.
Como decía Andrés Eloy Blanco: “con una proximidad de lejanía”. Porque con la tecnología moderna los procesos productivos son integrales. Se puede financiar lo que es materia prima, pero las empresas requieren mantenimiento, recursos humanos. No se puede hablar de un Motor en los términos del gobierno. En el caso de la Economía Comunal, Social y Socialista, en principio, la Constitución no contempla esos términos.
Y en segundo lugar, esa es una forma que el Gobierno ha establecido para mantener el derroche del dinero, que produce mediante la emisión inorgánica del Banco Central y, por supuesto, genera inflación, pero mantiene su política clientelista, porque ese motor no va a funcionar, pero si va a dilapidar recursos. Una vez más queda de manifiesto el fracaso del modelo económico que ha sido incapaz de suministrar los artículos de primera necesidad y está causando muertes por falta de medicinas.
Industrias básicas inactivas
Acerca del Motor de Industrias Básicas, Orlando Zamora manifestó que es harto conocido el problema que ellas tienen. Porque son industrias que requieren recursos de todo tipo, no solamente en dinero, sino los provenientes de la naturaleza, como las del Guri para generar electricidad. Están en el peor de los casos porque se han sobredimensionado en nóminas. Un ejemplo es que Sidor está por encima de los 18 mil empleados cuando llegó a funcionar exitosamente con solamente 7000 trabajadores. Producía 4 millones y medio de toneladas, pero ahora bajó a menos de una tonelada y eso ha ocurrido porque han tenido que suspender las actividades por la crisis eléctrica.
En general, todos los anuncios formulados por el Ejecutivo Nacional relacionados con una posible actividad económica no se ajustan a la realidad, ya que lo que busca el Gobierno es que empresas particulares y de otros países vengan a Venezuela, para que realicen inversiones; pero, no existen reglas claras para que lo hagan y, naturalmente, todas las expectativas que puedan tener los funcionarios no se cristalizarán.
