Wilfredo Boscán se estrenó en la gran carpa el jueves por la noche con los Piratas de Pittsburgh, al lanzar par de entradas en la victoria de su equipo frente a Bravos de Atlanta con pizarra de ocho anotaciones a dos en el PNC Park.
El criollo finalmente alcanzó su objetivo de lanzar en las Mayores, luego que en la temporada anterior fue promovido al equipo grande en tres oportunidades sin recibir el anhelado chance de lanzar.
“Estaba muy contento la primera vez que me subieron el año pasado, igual que en las otras dos. Pero Dios sabe por qué no me dieron la oportunidad”, declaró el serpentinero, según publica el portal de la LVBP.
“Fue algo que me motivó a trabajar más fuerte. Dejé buenos números el año pasado y esta temporada comencé bien. Así que me dieron el chance y me siento demasiado orgulloso de estar aquí y poder jugar”.
“Es lo que uno quiere, por lo que trabajas. Me siento súper contento”, dijo el marabino de 26 años de edad.
Boscán tomó el lugar en el bullpen del zurdo Cory Luebke, quien se había ganado un lugar en el equipo como invitado fuera de roster durante los entrenamientos.
El venezolano, por su parte, fue asignado a Ligas Menores poco antes del final de los entrenamientos primaverales.
“Era utilizado como abridor y me iba muy bien. Creo que a raíz de eso tuve la oportunidad de recibir el llamado nuevamente. Ahora quiero demostrar que puedo lanzar en las Grandes Ligas”, puntualizó Boscán.
“Es una emoción muy grande. Mi familia me vio pitchar y es algo muy grande. Muy diferente al año pasado, que tuve la oportunidad y no sucedió. Pero ya estoy aquí y trataré de aprovecharlo al máximo”, concluyó el zuliano, quien es el tercer criollo que se entrena en 2016.
