El Gobierno Nacional ha legalizado las ejecuciones policiales, denunció el doctor Mariano Alvarado, asesor de Provea, quien ayer participó en un conversatorio en la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado, sobre planes de seguridad.
Hay dos tipos de planes de seguridad, explicó. Están aquellos que han sido diseñados para enfrentar el problema de inseguridad ciudadana. Y los que son para garantizar la seguridad del Estado.
De los primeros tenemos 20 elaborados durante este proceso de gobierno chavista que han resultado en un rotundo fracaso porque ha habido un incremento de la delincuencia. El más preocupante es el Operativo para la Liberación del Pueblo (OLP), el cual ha venido a legalizar las ejecuciones policiales.
En Venezuela tenemos más de 30 años con ejecuciones policiales. Todos los gobiernos se distanciaban de ese tipo de delito argumentando que eran desviaciones policiales. No eran responsabilidad del gobierno, sino de los funcionarios. Pero, con la OLP, no. Con este operativo, el gobierno le está dando respaldo a la actuación de los cuerpos policiales para que realicen las ejecuciones. Tan es así que el propio ministro del Interior, es el que da los partes de guerra.
Tras cada operativo de OLP, según el seguimiento que le hemos hecho, salen siempre familiares denunciando que personas detenidas vivas posteriormente aparecen muertas. Buena parte de las víctimas no tienen antecedentes.
Importante es resaltar que José Vicente Rangel, excanciller entre otros cargos que ha ocupado, tiene cuatro programas consecutivos, los días domingo, llamándole la atención al gobierno sobre los graves abusos que se están cometiendo con los operativos OLP.
Rangel ha dicho que los pobres tienen miedo de esos operativos, porque se hacen masivas detenciones arbitrarias, especialmente de jóvenes entre los 17 y los 35 años, que con seguridad son arrestados.
OLP viene a significar todo lo contrario al esfuerzo que se inició con el gobierno del presidente Hugo Chávez, en el año 2006 para construir el modelo de Policía Nacional.