El receptor Wilson Ramos tuvo una temporada para el olvido en 2015 al terminar con los peores números ofensivos de su carrera.
El inicio de la actual zafra fue muy diferente a la pesadilla que vivió la mayor parte de la anterior. El criollo ha realizado ajustes que le permiten entrar en ritmo para convertirse en uno de los bateadores más productivos de los Nacionales en los últimos compromisos.
Además, ha sacado máximo provecho a una operación que le realizaron para corregir la visión.
En 2015 el receptor venezolano tuvo promedio de .229 en 128 compromisos por la novena de Washington. Antes de la jornada de anoche, Ramos bateaba .340 con OPS de .900 en 29 juegos.
El careta atribuye su mejoría en gran parte a la cirugía Lasik a la que se sometió durante los entrenamientos primaverales.
“Me siento sumamente cómodo en el home”, dijo Ramos. “La operación que tuve de la vista me ha ayudado bastante. Puedo reconocer mejor los pitcheos y no estoy haciéndole swing a pitcheos malos como el año pasado”, declaró el criollo a Nathalie Alonso del portal LasMayores.com.
“Me ponché muchas veces (en 2015) y pienso que fue por hacerle swings a los pitcheos fuera de la zona. La operación me ha ayudado y espero seguir haciendo el trabajo que he hecho hasta el momento”.
Ramos, finalista para el Guante de Oro en el Viejo Circuito en el 2015, también se enfoca en la defensa y en llamar buenos juegos para darle confianza a los lanzadores.
El valenciano estuvo detrás del plato la semana pasada para el juego en que Max Scherzer empató un récord de Grandes Ligas al ponchar a 20 bateadores en nueve innings.
Además, en su carrera ha recibido tres juegos sin hit ni carrera. “Para mí, la defensa es lo más importante para uno como receptor”, dijo Ramos.
“De verdad que he tratado de hacer el trabajo cada vez que estoy dentro del terreno. Trato de conocer a todos mis lanzadores para estar en la misma página con ellos. Eso me ha dado muchas cosas buenas, tanto los no-hitters como el juego de 20 ponches”.
El carabobeño de 28 años de edad se convertirá en agente libre al finalizar la temporada 2016.
“No es fácil dejar de pensar en la agencia libre. El mánager (Dusty Baker) me dio un consejo. Me dijo que saliera al terreno a dar lo mejor de mí cada día, que no pensara en la agencia libre, ya que muchos peloteros cuando van a la agencia libre, piensan en un contrato y tienen años malos. No me gustaría pasar por eso”.
A Ramos le gustaría renovar con los Nacionales. “La confianza que me han dado, las oportunidades y las puertas que se me abrieron dentro de esta organización. «Me siento bien con todos mis compañeros, con toda la gerencia, con el mánager, con los coaches y pienso que no hay nada mejor que estar en el lugar que tú quieres y donde te sientes cómodo”.