El joven italiano Giulio Ciccone, de 21 años, se impuso en Sestola (centro) en la décima etapa del Giro de Italia, marcada por el abandono de uno de los favoritos, el español Mikel Landa.
El luxemburgués Bob Jungels, segundo al inicio de la etapa, arrebató la maglia rosa a su compañero de equipo Gianluca Brambilla tras esta etapa de media montaña en la que el costarricense del Movistar Andrey Amador ascendió al segundo puesto.
Jungels es el primer ciclista del pequeño país europeo en liderar el Giro de Italia desde que lo hiciese Charly Gaul en 1959.
Ciccone, un neoprofesional que corre para el equipo italiano Bardiani, se escapó de sus compañeros de fuga (Pirazzi, Cunego) cuando restaban 13 kilómetros para la línea de meta.
El italiano cruzó la línea de meta 42 segundos por delante del ruso Ivan Rovny, y 1 minuto 20 segundos antes que el colombiano Darwin Atapuma.
El italiano Gianluca Brambilla, que portaba la maglia rosa, sufría en la penúltima ascensión del día, un puerto clasificado como de primera categoría; aunque pudo enlazar con el grupo de favoritos, volvió a distanciarse en los tres últimos kilómetros.
Jungels, compañero de Brambilla en el Etixx, cuenta con un margen de 26 segundos de ventaja sobre el costarricense Andrey Amador. El español Alejandro Valverde es tercero a 50 segundos, igualado con el holandés Steven Kruijswijk, mientras que el italiano Vincenzo Nibali cierra a 52 segundos el quinteto de cabeza.
Landa, tercero en la pasada edición del Giro, no pudo seguir el ritmo del pelotón en el primer puerto de esta etapa de media montaña de 219 kilómetros al encontrarse enfermo.
El miércoles se disputa la 11ª etapa, de 227 kilómetros, con salida en Módena, con sólo un pequeño repecho a 20 kilómetros de meta.