Ni el más ingenuo puede creer que con un “Estado de Excepción”, como el que vive nuestro país en estos momentos, puedan resolverse los problemas que padecemos. Se necesita más que un decreto de esta naturaleza para intentar al menos volver a cierta normalidad tanto en lo social como en lo político y en lo económico.
El asunto es que ninguno de quienes manejan esos hilos se siente suficientemente capaz de entender siquiera que el sistema político que han querido consolidar desde hace más de 17 años no tiene ninguna sustentación y ha fracaso ruidosamente. Tampoco nadie cree en las falsas promesas que a diario escuchamos en las tediosas cadenas presidenciales. Para el Presidente y sus ministros todo marcha a paso de vencedores, sin obstáculos de ninguna naturaleza. Allí no se habla de escasez, de los cortes de luz, del problema del narcotráfico y menos de los padecimientos de los ciudadanos en las colas para tratar de conseguir alimentos para llevar a casa. Tampoco se menciona a la creciente inseguridad en que vivimos a diario, en el filo de una navaja, como esperando un turno para convertirnos en víctimas de una delincuencia que no tiene misericordia con sus víctimas, que mata por solo placer de matar. A veces nos hacemos preguntas con respuestas muy difíciles para poder entender el aumento de la criminalidad en Venezuela. ¿Quién enseñó a matar a los venezolanos?, un pueblo que siempre fue tranquilo, incluso cuando tuvo que sufrir la dictadura militar en tiempos de Pérez Jiménez en el pasado. Repetimos: un “Estado de Excepción” no resuelve los problemas anotados en estas líneas. Se necesita más bien ensayar con diálogo constructivo, sacrificando ideologías de parte y parte para favorecer a las grandes mayorías, esas que ya no entienden de socialismos ni de imperios.
¡EL SHOW! En dos semanas Luis Chataing estará de nuevo en Barquisimeto para entretenernos, por una parte, y hacer un nuevo intento para abrirnos los sentidos sobre la Venezuela insólita en la que vivimos en estas conversaciones públicas que se han puesto de moda en todo el mundo. Por supuesto que recomendamos el show de Luis, un personaje que nos cae muy simpático y que sabe decir las cosas como son… RONDAS: Nos encanta dar vuelta por la ciudad para disfrutar de los talentos de nuestros artistas regionales. En ese periplo dos tríos que se llevan las palmas por su gran calidad vocal: El Trío Internacional y el Altamira, cuyos repertorios satisfacen a los más exigentes. Están en el Martini Bistró del hotel Jirahara y el segundo en la Casa Nova Grill del centro comercial Los Leones. Nada que envidiar a los legendarios Panchos y Los Diamantes, dueños y señores del bolero con guitarras. 30 años está cumpliendo Megan Fox, considerada por la comunidad del cine como una de las actrices más bellas de la industria. Megabella… EUROVISIÓN: Nadie entiende como la representante de España en el festival de la canción europea pueda haber competido cantando en inglés. Las críticas han llovido sobre los organizadores de la Península. Si no lo sabían, la ganadora fue la representante de Ucrania, una chica de nombre Jamala.
Todo ha concluido en la Liga Española, que demostró una vez más, ser la organización donde el fútbol tiene su trono. Impactante final entre Real Madrid y el Barcelona con una diferencia de apenas un punto para el juego final. Ambos equipos ganaron sus respectivos compromisos, como se esperaba, correspondiéndole a los catalanes el honor de levantar la Copa al derrotar al Granada, precisamente el equipo ante el cual perdiera el Madrid a mitad de temporada. Solo falta el partido final de la Champions, un título ambicionado en el mundillo del fútbol como símbolo de la excelencia. Se jugará en Milán y se enfrentarán el Real Madrid y el Atlético, justa representación de una ciudad donde se respira fútbol casi todo el año y las pasiones se desbordan entre los seguidores de ambos conjuntos. También una ciudad donde la afición está absolutamente dividida. Dos aficiones con diferentes sentimientos, orgullosos de su pasado y de su presente. Ganara quien gane, Madrid celebrará, y a la distancia queremos que sea frente a la Diosa Cibeles, donde palpita el corazón de una ciudad que aprendimos a querer hace mucho tiempo ¡Hala Madrid!