Venezuela es un país con un alto índice de probabilidades sísmicas: 80% de la población vive en zonas de alto riesgo, indicó la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas (Funvisis).
A causa de los desastres naturales que han ocurrido en América Latina en los últimos meses: huracán en Uruguay, terremoto en Ecuador, sismo en México, EL IMPULSO consultó a expertos sobre el tema.
Especialistas en sismología indican que los terremotos son impredecibles, sin embargo el geólogo Lermit Figueira, sustentándose con un estudio realizado por la Fundación para la Prevención del Riesgo Sísmico de Mérida (Fundapris), citó que históricamente un terremoto se puede repetir luego de 50 a 70 años.
En relación a lo apuntado, Figueira expuso sus declaraciones utilizando como ejemplo a la ciudad de El Tocuyo, la cual fue víctima de un sismo en 1950 de magnitud 6.6 según la escala de Richter. “Hoy hace 66 años de lo ocurrido, estamos, estadísticamente en la espera de que se repita otro de una magnitud similar o mayor”.
Enfatizó que mientras haya temblores de pequeña magnitud periódicamente, se pudiese garantizar que no habrá uno de mayor magnitud. Destacó que no era muy seguro esta disertación, ya que la actividad sísmica se estudia, mas no se predice.
Figueira compartió un hecho particular que lo había llevado motivado a estudiar geología e informar a las personas todo sobre medidas preventivas contra sismos.
“Estuve presente, tanto en el terremoto de El Tocuyo en 1950, como en el de Caracas de 1967”, dijo. Agregó que luego de haber sobrevivido a ambos terremotos sintió que debía instruir a las personas sobre medidas preventivas contra sismos, para evitar pérdidas humanas en otro hecho de la misma naturaleza.
Los incidentes sísmicos figuran como uno de los principales riesgos a gran escala en Venezuela. El ente que evalúa este fenómeno es el Funvisis, quien constantemente provee información referente a estudios sismológicos en todo el país, lo que beneficia, tanto al colectivo enseñándole a actuar en caso de emergencia, como a los expertos, cuyos estudios promueven investigaciones.
De esta manera, el investigador del Centro Sismológico Universidad de Oriente, Jorge Luis Rojas, difiere de lo apuntado por Figueira, ya que establece, que los sismos “no son continuos, ni periódicos”, es decir, que si sucede uno hoy, no necesariamente deba repetirse en 50 o 60 años, explicó.
Relató que esas probabilidades no tienen basamento científico, eran sólo análisis estadísticos de la historia. “Lo que sí es seguro, es que donde haya un sismo, se repetirá otro”, indicó que esto permite que las zonas sísmicas puedan ser estudiadas constantemente.
El lugar de mayor actividad sísmica en Venezuela, corresponde a una franja de unos 100 km de ancho, precisada a lo largo de los sistemas montañosos de Los Andes, la Cordillera Central y la Cordillera Oriental, en los cuales se ubican los principales sistemas de fallas tectónicas.
La población está ubicada en su mayoría sobre las fallas mencionadas, lo que significa mayor probabilidad de sismos en las zonas pobladas.
Por otra parte, el vicepresidente del Colegio de Ingenieros Lara, Julio Gutiérrez, explicó que dentro de las medidas preventivas ante un terremoto, deben consultarse y aplicarse las normas establecidas por la Comisión Venezolana de Normas Industriales (Covenin), ya que en ellas se establece un punto de partida para edificar en una zona segura. Respecto a cómo se preparan los venezolanos para evitar en lo posible pérdidas por una destrucción estructural de su vivienda.
Al respecto, el ingeniero Gutiérrez revela que en “Venezuela se aplican muy bien las normas pertinentes para evitar que un sismo sea devastador”. Relató que hubo un caso donde una escuela se derribó por un sismo y, luego de estudios posteriores, se determinó que el sitio no era apto para construir, lo que ocasionó la suspensión del título de quien asumió ese proyecto.
Cabe destacar que Venezuela ha demostrado ser un país donde abunda la improvisación, no sólo en Barquisimeto se han registrado edificaciones donde, además de no estudiar previamente el suelo, el responsable pasó al anonimato sin dejar rastro, resultando una construcción bajo el riesgo de ser destruida por un sismo.
Respecto a lo ocurrido en Ecuador, el ingeniero acota que cada país tiene sus respectivas normas de prevención sismológica en la construcción y, aunque desconoce las de Ecuador, probablemente la cantidad extrema de pérdidas humanas y materiales, haya sido por “no tomar en cuenta esas normas”.
Gutiérrez reveló que los ingenieros estudian a menudo los sismos menores a 7.0, según la escala de Richter, con el fin de ampliar el margen de prevención, a su vez, declaró que en Venezuela en 1984 se hizo el IV Congreso de Sismología e Ingeniería Sísmica. A raíz de eso, emanó la necesidad de elaborar “la microzonificación sísmica del área metropolitana, Barquisimeto-Cabudare”.
Lo que permitió “suministrar información veraz” a los ingenieros, sobre el estudio sismológico de la zona. Finalmente agregó que los participantes para realizar esta investigación fueron: Decanato de Ingeniería Civil en la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA), Cámara de la Construcción Lara, Colegio de Ingenieros Lara y Funvisis.
Antes y después
* Seleccionar un sitio abierto y seguro donde acudir después del sismo.
* Colocar las llaves cerca de la salida para desalojar la vivienda rápido.
* Identificar en los lugares más frecuentados las salidas de emergencia.
* Incluir en una mochila un pito y referencias personales.
* Los objetos que estén adheridos a la pared, deben ser reforzados.
* Disponer de un extintor de incendios. * Mantener cerca las herramientas necesarias para cerrar llaves de agua y gas.
* Detener los servicios de agua, luz y gas.
* No encender fósforos, si hay ruptura de la tubería de gas puede ocasionar una explosión.
* Encender la radio de batería para escuchar las indicaciones de las autoridades.
* Luego de desalojar, no se regrese por ningún motivo.
* No caminar descalzo.
* Alejarse de las construcciones que se puedan derrumbar.
Funvisis recomienda:
* Mantener la calma.
* Si está bajo techo, debe protegerse debajo de una mesa o escritorio y sujetarse fuertemente.
* En caso de que no haya nada con que cubrirse, colocarse en posición fetal debajo de una columna o en una esquina de la edificación.
* Si está en un edificio, alejarse de los balcones y paredes externas.
* Mantenerse alejado de ventanas, espejos y puertas de vidrio.
* Procurar no alejarse del grupo.
* Desalojar de forma ordenada el recinto y dirigirse a un lugar abierto previamente establecido.
* Si se encuentra en una zona rural, mantenerse alerta de las rocas, árboles u otros objetos que puedan desprenderse.
* Estando en la calle, debe alejarse de postes, cables eléctricos y edificios.
* Alejarse del mar si percibe movimientos extraños, pueden ocurrir grandes marejadas o un tsunami.