Desde hace apenas tres semanas las oficinas del Instituto del Ambiente del estado Lara fueron mudadas a las instalaciones de la biblioteca pública Pío Tamayo y ya el hampa hizo de las suyas.
En horas de la madrugada de ayer luego de abrir un hueco en la cerca de alfajol y retirar cinco vidrios de ventanas laterales, los delincuentes ingresaron a la biblioteca, fueron hasta la oficina donde funciona el instituto y reventaron el vidrio de la puerta. Se llevaron papelería y materiales de oficina. Además cargaron con aproximadamente seis equipos de computadoras que pertenecen al área de investigación, promoción y planificación ambiental.
El ingeniero José Luis Coello, presidente del instituto, comenta que los costos de los equipos son elevados, pero lo que más importa es el material perdido en las computadoras.
“Son ocho años de trabajo de investigación, de campo, en donde está el sistema de información geográfico, el levantamiento, el registro, los mapas satelitales de Lara. Además están los estudios exhaustivos de toda la Cuenca alta de Río Tocuyo.
Así mismo teníamos un registro de las deforestaciones, de las personas que trafican con madera y aquellas que extraen minerales de forma ilegal”, expresa Coello.
Destaca el ingeniero que no toda la información había sido respaldada. Indicó que se comunicará con el Ministerio de Ambiente y de Turismo para ver qué material le pudieran suministrar, esperando que la política no se interponga en el trabajo.
Los trabajadores de la biblioteca expresan que son espacios solitarios, oscuros y no cuentan con vigilante alguno. No es la primera vez que son víctimas del hampa y en reiteradas ocasiones han solicitado seguridad y no ha sido brindada.
En julio del 2015 estos mismos espacios fueron invadidos por los delincuentes cuando funcionaba el Infocentro y en esa oportunidad se llevaron diez computadoras.
Funcionarios de Polilara estaban en el lugar recibiendo la denuncia e inspeccionando las respectivas instalaciones.
